Nairo Quintana, protagonizó un momento de diversión y desafío al unirse al reto de los huevos parados en el centro del mundo, de una manera bastante particular con la que demostró que su valentía va más allá de las carreteras y dejó claro que tiene los “huevos bien puestos” a los que literalmente colocó uno en el norte y otro en el sur en la línea divisoria del ecuador.
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El ciclista colombiano fue este domingo la estrella de la segunda edición en Quito del “Giro de Italia Ride Like a Pro”, una ruta que reunió a unos 2.000 ciclistas profesionales y aficionados para recorrer las calles y los alrededores de la capital de Ecuador.
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Allí, aprovechó para visitar el centro del planeta en donde se le midió a hacer un particular reto con el que demostró una gran osadía.
Nairo Quintana se le midió al reto de los huevos parados
Junto al relator de ciclismo, el argentino Mario Sabato, Nairo se mostró dispuesto a enfrentar el reto: “Estamos en el centro del mundo. Lo ideal es colocar un huevo que no se caiga. Yo voy a colocar dos huevos, uno al norte y otro al sur. Que quede grabado”, expresó entre risas.
En ese instante, el ciclista se paró justo en la línea que divide el norte con el sur y, con mucho humor, se abrió de piernas para dejar sus testículos (huevos en argot popular), uno en cada hemisferio.
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La historia de los huevos parados en la mitad del mundo
La historia se suma a las curiosas tradiciones del lugar, donde desde hace casi 30 años, el Museo de Sitio Intiñan realiza el “DESAFÍO DEL HUEVO”, un peculiar reto que consiste en equilibrar un huevo en la cabeza de un clavo.
Nairo Quintana, por su parte, no se quedó con un simple huevo en la cabeza, sino que llevó la diversión a otro nivel.
