En las últimas semanas los colombianos han visto reflejado en sus facturas un incremento considerable en los costos de los servicios de energía. Este es un asunto que toca el bolsillo y pone sobre la mesa una discusión que implica aristas importantes como el Fenómeno de El Niño y las condiciones actuales de la seguridad energética en Colombia.
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Recientemente, la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Públicos y Comunicaciones (Andesco) se refirió a la situación del sector que se vive en el país, que implica factores económicos de cara a la llegada del Fenómeno de El Niño, un periodo de sequía que podría afectar la seguridad energética en Colombia.
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Datos clave sobre el panorama actual del sector energético
Hace poco la Corte Constitucional decidió ‘tumbar’ el decreto de “emergencia económica” que firmó el presidente Gustavo Petro, en el que se daba vía libre al cobro de una tarifa de energía adicional a los estratos 4, 5 y 6, con el fin de apoyar al departamento de La Guajira.
Bajo esa directríz, durante dos meses se recibieron recursos que ahora, según Andesco, serán devueltos a los usuarios a través de la misma factura, una vez esté en pie la sentencia.
“Lo que sí está claro es que esa platica no se perdió. Cada uno va a tener nuevamente en su factura la disminución”, aseguró Camilo Sánchez, presidente de Andesco.
Aunque esa es una noticia positiva, por otro lado, se confirmó que los cobros de los servicios que fueron congelados durante la pandemia podrían iniciar en los próximos días. Por tal razón, Camilo Sánchez manifestó que buscarán que esa opción tarifaria sea pospuesta para el próximo año, una vez el país salga de la amenaza que representa el fenómeno de El Niño.
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¿Por qué se prevé un incremento en los costos de energía?
Según un informe reciente del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), el Fenómeno de El Niño podría sentirse con mayor intensidad entre diciembre de 2023 y febrero de 2024. Sin embargo, sus efectos tocan directamente al sector energético y podrían durar hasta mitad del próximo año. Por tal razón, estos son algunos de los desafíos que se prevén.
1. Reducción de la generación hidroeléctrica.
2. Aumento en la demanda de energía, especialmente en zonas calurosas del país, donde la necesidad de sistemas de aire acondicionado podría incrementar de manera significativa.
3. Afectación a las redes de transmisión y distribución de energía.
4. Incrementos en los costos de generación.
De acuerdo a datos del Ministerio de Minas y Energía y Corficolombiana, en el país “la generación de energía hidráulica corresponde a un 66,8%”, lo que nos vuelve directamente dependientes de recursos hídricos.
Según el Ideam, las regiones que se verán más afectadas serán la Región Caribe, la Región Andina y el Sur del pacífico, por lo que desde Andesco se recomendó tener precauciones.
“Lo que estamos diciendo es que con lo que se hizo con Electricaribe entraron dos empresas que han hecho inversiones muy poderosas en los dos últimos años y medio (…) Estamos en un momento crítico de calor (…) En la costa tenemos que lograr que la gente entienda que es una solución de equipo y que el Gobierno tiene que darle una solución con recursos nuevos y por eso le estamos solicitando”. Agregó que “está en nuestras manos poner parte de evitar ese incremento con el consumo, desconectar los servicios que no tienen uso, usar en la mejor forma posible, apagar en el momento en que uno no está eso ayuda, esa es la parte que puede poner el usuario”, agregó el presidente de Andesco.
Además, se resaltó que hay un aumento de incidentes en el orden público que afectan la infraestructura energética en zonas como el Cauca y Nariño, focalizándose particularmente en torres de energía eléctrica.
Estos eventos comprometen la integridad de la infraestructura para llevar energía a los hogares e industrias.
“Resulta imperativo fortalecer y ampliar los controles existentes, así como redoblar los esfuerzos y recursos destinados a la protección de la infraestructura energética. Este proceso debe llevarse a cabo en estrecha colaboración con las fuerzas de seguridad pública”, anotó Ortega.
Las condiciones actuales apuntan a que podría darse un incremento en las tarifas de manera considerable. Sin embargo, desde los gremios proponen que, de la mano del Gobierno, se deberá disponer de recursos especiales para que los aumentos en las facturas de la energía no sean desmedidos.
“Lo peor que le puede pasar al servicio es que se incremente por encima de la inflación, porque el 70 % de los colombianos ganan el salario mínimo o menos, o sea, nosotros estamos buscando tener la mejor oportunidad con el mejor servicio al costo verdaderamente óptimo y que sea pagable”, concluye el presidente de Andesco, quien considera que después del fenómeno de El Niño el país volverá a tener la normalidad en los costos de las tarifas de energía.