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Pescadores celebran el primer Festival del Manglar en Mallorquín, en medio de impactos ambientales

En la zona de esta ciénaga en Barranquilla se construye un Ecoparque. Las obras generan diversas opiniones en la comunidad.

Grupo Cohesión Siembra de mangle en la Ciénaga de Mallorquín.

Este martes 26 de julio se llevó a cabo el primer Festival del Manglar, en la Ciénaga de Mallorquín en Barranquilla, en ocasión a la conmemoración del Día Internacional del Ecosistema del Mangle. Esta celebración es promovida por la Unesco para incentivar la conservación de este ecosistema, uno de los más amenazados por la contaminación y el cambio climático en el planeta.

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Durante todo el día, se desarrollaron diferentes actividades de integración con la comunidad aledaña a la ciénaga de Mallorquín, como un torneo de velas y regata con pescadores artesanales, siembra de mangles e incluyó una feria de emprendimientos y la presentación de artistas locales.

“Los mismos pescadores nos pidieron de la zona nos pidieron que querían tener su propio festival como un atractivo turístico para esta zona y que honre la biodiversidad y que sea sostenible para estas familias que tanto han luchado por preservar este manglar”, dijo a PUBLIMETRO Johana Garcés, directora de la Fundación Grupo Cohesión, una de las entidades organizadoras del evento.

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El grupo Cohesión a través de un trabajo de voluntariado realiza ecotropas, en las que recorren las fuentes hídricas y hacen limpieza y educación ambiental en estas zonas. “Trabajamos la ecología emocional con los seres humanos que viven en estos entornos a la vez hacemos pedagogía para que los residentes no permitan que el agua se contamine”, señala Garcés.

Grupo Cohesión Ecotropa de limpieza en la ciénaga de Mallorquín.

Preocupación por impacto ambiental del Ecoparque en Mallorquín

Los residentes del proyecto Ecoparte Ciénaga de Mallorquín en La Playa resaltan que, aunque no se oponen al desarrollo que traerá esta nueva intervención en la ciudad, sí piden que el alcalde Jaime Pumarejo se siente con los pescadores porque hasta el momento no lo ha hecho.

El caso del corregimiento de La Playa es distinto al del barrio Las Flores, según quedó evidenciado en el tour Ciénaga Mallorquín, organizado por el politólogo y joven veedor ciudadano Pablo Pachón, quien se ha dedicado a hablar con la comunidad y a recoger sus necesidades en el área. En Las Flores se han concretado algunas mesas de trabajo, mientras que en La Playa aún esperan la socialización con el mandatario.

Grupo Cohesión Reunión con el veedor ciudadano Pablo Pachón.

Por su parte, Alfredo Manuel Torres, presidente de la Asociación de Pescadores de La Playa, teme que el proyecto, por ser ecológico, para el avistamiento de aves obligaría a los pescadores a no encender sus motores fuera de borda, que usan para poder pescar en la zona y afirma que tampoco han recibido información sobre las alternativas económicas para el gremio si esto llega a concretarse. “No podríamos poder pescar en la ciénaga y esa nuestra gran preocupación porque nos quedaríamos sin sustento”, lamentó.

En esta zona el área intervenida será 2.030 m2. En el primer nivel, se ubicarán espacios como restaurantes, tienda de souvenirs y un teatrino, cuya gradería baja hasta el nivel del agua. También habrá un sendero peatonal y ciclorruta.

De igual forma, Leoni Noriega, integrante de la Fundación Manglarte, quien realiza trabajo social y cultural en la zona, habló sobre el tema. Afirma que la mayoría de los residentes desconocen el proyecto, pese a que lleva dos años en ejecución. También teme que al convertirse el ecoparque en una zona muy concurrida por el público, las aves migratorias que anidan allí tengan que buscar otro refugio, debido al exceso de ruido y a la masiva presencia humana.

Grupo Cohesión. Ecosistema del Manglar en la Ciénaga de Mallorquín, en Barranquilla.

Leoni también está preocupado por la calidad el agua de la ciénaga, porque el corregimiento de La Playa, al no tener un alcantarillado, todas las heces fecales y las aguas servidas llegan a contaminar este cuerpo de agua. Además asegura que el proyecto impacta a los pescadores porque van a tener que talar un área del manglar para la adecuación de una vía de ingreso a la zona y entre menos mangle, menos biodiversidad y por ende menos pesca, afirmó.

Las autoridades han informado que el mangle talado en ese acceso será sembrado nuevamente, pero en el Parque Isla de Salamanca, no en Mallorquín. La comunidad considera que debe ser sembrado en la misma zona.

Tampoco la Alcaldía ha sido clara con el uso de los motores de las lanchas de los pescadores que necesitan para la pesca y para el transporte de turistas en la zona. Los habitantes reiteran que no se oponen al proyecto ni al desarrollo, pero que no se vean afectados.

“Desde nuestros ojos siempre habrá una versión buena y otra que no es tan positiva. Muchas de las familias de alguna forma se han visto afectadas, pero nosotros no queremos quedarnos en el proceso de quejas sino más bien aportar y revisar qué podemos hacer nosotros como comunidad y mediadores para contribuir a que el impacto ambiental del Ecoparque sea adaptado con los cambios que vienen”, detalló Garcés, de la Fundación Grupo Cohesión.

Cabe recordar que, de acuerdo al Ministerio del Medio Ambiente, el valor total del ecoparque es de 230.000 millones, proyecto que se dividió en dos fases; la primera ya está en ejecución y es financiada con recursos de la Alcaldía de Barranquilla, por un valor aproximado de 118.000 millones, y la segunda contará con una inversión de 115.000 millones del Presupuesto General de la Nación.

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Importancia del manglar

Los manglares constituyen un hábitat fundamental para el ciclo de vida de algunas especies, al ser el hogar de las primeras etapas de un sinnúmero de peces, muchos de ellos de importancia comercial.

Grupo Cohesión Ecosistema del manglar en la ciénaga de Mallorquín en Barranquilla.

De acuerdo al Ministerio del Medio Ambiente, los manglares hacen parte de los ecosistemas de carbono azul, que junto a los pastos marinos son estratégicos para enfrentar el cambio climático; por esa razón, su conservación, preservación, restauración y uso sostenible los hacen protagonistas de las Soluciones Climáticas Basadas en la Naturaleza, pues estos recursos naturales almacenan, en promedio, hasta cinco veces la cantidad de carbono por hectárea que puede haber en un bosque continental, capturándolo por décadas y hasta siglos.

A esta primera versión del Festival del Manglar también se han sumado el Grupo Argos, la Corporación Autónoma Regional del Atlántico C.R.A., la Armada Nacional, Escuela de Policía Antonio Nariño y Mebar, la Universidad del Atlántico, la Universidad Nacional Abierta y a Distancia, Triple AAA, la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca, Invemar y diversos aliados.

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