En esta época la ballena yubarta, que viaja desde la Antártida, llega al pacífico colombiano para reproducirse en sus cálidas aguas.
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Desde Buenaventura hasta Chocó pueden ser fácilmente avistadas, sobre todo cerca de los municipios de Bahía Solano y Nuquí, ya que allí se encuentra el Parque Nacional Natural Utría, lugar predilecto al que van a tener sus crías.
Aunque los pobladores del lugar son extremadamente conscientes de la biodiversidad que alberga su océano y desde hace tiempo se están dedicando a la pesca artesanal, grandes barcos pesqueros industriales de todas partes del mundo, pero principalmente Japón y Panamá, suelen entrar ilegalmente a estas aguas en busca principalmente de atún. En medio de sus faenas capturan todo tipo de especies, incluidos delfines, y muchas veces sus redes caen al agua y quedan atascadas en el fondo del mar.
A estas se le denominan redes fantasmas, en la que infortunadamente cayó este ballenato que perdió toda su cola, parte del cuerpo esencial para su vida.
“Muy probablemente la ballena no vaya a poder sobrevivir porque la cola es una parte esencial en todo el tránsito natatorio de ella y es fundamental para ella en el caso de las inmersiones profundas», aseguró Cristian Bermúdez, biólogo marino, al ser consultado sobre el incidente, en Noticias Caracol.
Aunque en el mencionado medio María Clara Díaz, directora del Programa Marino de Conservación Internacional de Colombia, hizo un llamado de atención sobre las actividades en pesca que no están reguladas en el país, hay que tener en cuenta que dese hace tiempo el Instituto de Investigaciones Ambientales del Pacífico (IIAP) viene velando por el cuidado del océano en el territorio. No solo han capacidado a toda la población de pescadores en pesca artesanal (incluso logrando una zona exclusiva para ello en 2013) sino que también han capacitado a buzos para sacar estas redes fantasmas que tanto están afectando el ecosistema, sin embargo sus presupuestos son limitados.
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