El presidente Gustavo Petro volvió a responder con firmeza al expresidente de Estados Unidos Donald Trump, luego de que este calificara a Colombia como una “guarida de drogas” y lo tildara de “líder tonto”. En un mensaje publicado en su cuenta de X (antes Twitter), Petro defendió la imagen del país y cuestionó el enfoque estadounidense frente al problema del narcotráfico.
“Colombia no es una guarida de drogas; de hecho, las drogas que se producen en Colombia terminan en guaridas en EE.UU. para el consumo para el cual se produce”, escribió el mandatario. Según Petro, los gobiernos productores y consumidores deben construir estrategias comunes para enfrentar el fenómeno desde una visión compartida que ataque tanto la oferta como la demanda.
El presidente colombiano aprovechó para resaltar la identidad cultural del país y contrarrestar los señalamientos de Trump con una referencia literaria. “Colombia es el país de Gabriel García Márquez. Es clave que la ciudadanía y el gobierno de los Estados Unidos encuentren caminos para disminuir el consumo y leer más a García Márquez”, expresó. El comentario se dio tras conocerse que algunos libros del Nobel colombiano fueron prohibidos en Estados Unidos en medio de la escalada verbal entre ambos líderes.
El intercambio de declaraciones refleja un aumento de tensiones diplomáticas entre Bogotá y Washington, marcado por profundas diferencias políticas e ideológicas. Petro ha cuestionado duramente los recientes operativos militares de Estados Unidos en el Caribe, realizados bajo el argumento de combatir el narcotráfico. Dichas operaciones han dejado más de 30 muertos y la destrucción de varias embarcaciones, según el propio gobierno estadounidense, que asegura haber hundido nueve lanchas en una nueva fase de su guerra contra las drogas.
El mandatario colombiano considera que esas acciones violan el derecho internacional y representan una agresión a la soberanía regional. Por su parte, Trump ha insistido en que su estrategia busca proteger a Estados Unidos de las organizaciones criminales latinoamericanas, a las que califica como terroristas.
A las tensiones por el narcotráfico se suman las diferencias entre Petro y Trump sobre el conflicto entre Israel y Hamás. Mientras el colombiano ha pedido una salida diplomática y humanitaria, el expresidente estadounidense ha respaldado la ofensiva militar israelí.
El cruce de declaraciones confirma un nuevo episodio de fricciones entre Gustavo Petro y Donald Trump, que refleja la polarización política y la disputa por el discurso internacional sobre drogas y seguridad en el continente americano.

