El ministro de Defensa, Pedro Arnulfo Sánchez, anunció este sábado 2 de agosto que presentará acciones legales penales, civiles y disciplinarias por una serie de mensajes en redes sociales que lo vinculan con supuestos actos de corrupción y traición al gobierno del presidente Gustavo Petro.
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Según expresó el funcionario, las acusaciones carecen totalmente de fundamento y, en su criterio, buscan “desestabilizar a las Fuerzas Armadas” en un momento crítico para el país. “No solo mancillan mi honor y reputación, sino que también constituyen un grave intento de desestabilizar a las Fuerzas Armadas y socavar la confianza entre estas y el presidente de la República”, señaló.
El origen de la polémica: chats filtrados en redes
La controversia surgió tras una publicación del sargento (r) Alexander Chala Sáenz, quien difundió en redes sociales capturas de pantalla de una supuesta conversación en la aplicación Signal. En los mensajes, según él, se discutirían temas sensibles como favores, visitas al Comando General y negociaciones al margen de la Presidencia.
En su publicación, Chala afirmó:
“Haré públicos unos chats sumamente delicados, una conversación que comprometería tanto al ministro de la Defensa, Pedro Arnulfo Sánchez, como al general (r) Eduardo Enrique Zapateiro Altamiranda, alias Ajuaa”.
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El sargento retirado también sostuvo que los números de teléfono visibles en las imágenes corresponderían efectivamente a los involucrados y que el contenido sugeriría un doble discurso que pondría en riesgo la seguridad nacional.
“No permitiré que este tipo de delitos queden impunes”
El ministro no solo desmintió los señalamientos, sino que calificó los chats como “injuriosos, calumniosos y basados en información ficticia creada con dolo”. Además, aseguró que de comprobarse la participación de funcionarios públicos en la difusión o creación de los mensajes, se interpondrán también quejas disciplinarias.
“Mi honor y lealtad son los únicos activos que poseo, y no permitiré que sean mancillados sin consecuencias. Defenderé mi buen nombre por todas las vías legales disponibles”, afirmó Sánchez a través de sus canales oficiales.
¿Crisis política o desinformación orquestada?
Desde el Ministerio de Defensa se ha insistido en que este tipo de ataques buscan generar división, caos y desconfianza, especialmente en un contexto donde las relaciones entre las Fuerzas Armadas y el Gobierno han estado bajo observación por distintos sectores.
Sánchez ha sido enfático en que no permitirá que el debate político ni los ataques personales afecten la estabilidad institucional, y pidió respeto a las vías judiciales para esclarecer los hechos.
El lunes 4 de agosto se formalizarán las denuncias anunciadas por el jefe de la cartera de Defensa. Estas incluirán solicitudes de verificación sobre la autenticidad de las capturas, posibles delitos informáticos y determinación de responsabilidades tanto en la creación como en la circulación del contenido.
La Comisión Nacional de Disciplina Judicial, la Procuraduría y la Fiscalía podrían ser las encargadas de adelantar las investigaciones pertinentes. Mientras tanto, el caso abre un nuevo capítulo en el debate sobre la veracidad de contenidos digitales y su impacto en la estabilidad de las instituciones del país.