El país quedó consternado con el secuestro de Lyan Hortúa, un niño de 11 años que fue retenido por disidencias de las FARC en Jamundí, Valle del Cauca. Pero lo que parecía ser un simple caso de extorsión por parte de un grupo armado ilegal, terminó siendo una historia mucho más compleja, tejida con hilos de violencia, narcotráfico, traición y venganza.
Más noticias: En el recibo del agua: Denuncian campaña política con recursos públicos en Pereira
Detrás del secuestro del menor, según revelaciones de la revista Semana, está la sombra de su padre biológico: José Leonardo Hortúa, alias Mascota, conocido también como El Mochacabezas. Hortúa fue un sanguinario miembro del cartel de Los Rastrojos, brazo derecho del capo Diego Rastrojo, y responsable de una ola de violencia atroz en el centro y norte del Valle del Cauca. Sus crímenes incluyeron decapitaciones, desmembramientos y desapariciones forzadas.
Aunque fue capturado en 2010, Hortúa recibió casa por cárcel alegando problemas de salud. Según reportes de El Tiempo, era considerado un sucesor natural dentro de la estructura criminal y mantenía el control del grupo desde la clandestinidad. Finalmente, fue asesinado en 2013 en Cali, mientras se encontraba en una cita odontológica.
Le puede interesar: Grave accidente en Ciudad Bolívar: bus del Sitp se volcó y dejó varios heridos
La historia dio un giro siniestro cuando se conoció que, tras su muerte, Hortúa habría dejado bienes y dinero a nombre de su pareja, Angie Bonilla, madre de Lyan. ‘Diego Rastrojo’, desde el poder que aún ejercía, exigió la devolución de lo que consideraba suyo. El supuesto incumplimiento de esa “deuda” habría desencadenado la captura del menor como forma de presión. Se estima que el monto reclamado ascendía a 37 mil millones de pesos.
Las disidencias de Jaime Martínez, que ejecutaron el secuestro, no buscaban a Lyan directamente. Al no encontrar a su madre ni al padrastro, se lo llevaron como ficha de presión en un conflicto que involucra a viejos actores del narcotráfico.
Pese a las amenazas, una orden no escrita circuló en el bajo mundo: nadie debía tocar al niño. El respeto que generaba la figura de Hortúa entre los capos aún vivos fue clave para evitar un desenlace fatal. Según fuentes consultadas por Semana, si algo le hubiera ocurrido a Lyan, podría haberse desatado una guerra entre organizaciones criminales del Valle.
¿Quiénes eran Los Rastrojos?
Los Rastrojos fueron una de las organizaciones criminales más poderosas del narcotráfico colombiano en la década de los 2000. Surgieron como brazo armado del Cartel del Norte del Valle y luego se consolidaron como un grupo narcoparamilitar autónomo.
Lea también: En Video: Piques ilegales en la Av. Boyacá con 170 a plena vista de un CAI desatan indignación ciudadana
Según la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación, su estructura combinaba operaciones de narcotráfico, control territorial y sicariato. Estaban presentes en regiones como el Valle del Cauca, Nariño, Norte de Santander y la costa pacífica, con conexiones internacionales hacia Centroamérica y México.
El Ministerio de Defensa los consideraba una de las mayores amenazas a la seguridad nacional, por su capacidad armada y su sofisticada red de lavado de activos. En su apogeo, llegaron a tener más de 1.500 hombres en armas.
Diego Pérez Henao, alias Diego Rastrojo, fue su máximo cabecilla hasta su captura en Venezuela en 2012. En su entorno operaban hombres como alias Guacamayo, Alacrán, Pipe Tuluá y Mascota.
Le puede interesar: ¿Barcelona es la primera opción? Papá y hermano de Luis Díaz hablaron de su supuesta llegada al Real Madrid
Con el paso de los años, muchos de sus miembros terminaron integrándose a disidencias de las FARC, al ELN o a bandas emergentes como La Inmaculada, liderada por Pipe Tuluá, apadrinado por el padre de Lyan.
La historia de Lyan no es solo la de un niño víctima del secuestro. Es también la herencia de una guerra soterrada que aún deja cicatrices abiertas en el corazón del Valle del Cauca. Una guerra donde los apellidos pesan más que las decisiones del Estado.

