A través de las redes sociales se conoció el aterrador caso de un adolescente de solo 16 años que asesinó a sus padres adoptivos y a su hermana porque de castigo le quitaron el celular. El hecho se registró en Sao Pablo, Brasil. El adolescente no solo los mató a todos sino que convivió con los cuerpos antes de confesarle a las autoridades el crimen. Aunque fue detenido, las leyes en el vecino país indican que los menores de 18 años son inimputables, por lo que el caso ha tenido mayor resonancia en la sociedad.
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El adolescente decidió acabar con toda su familia porque le quitaron el celular y un par de días después confesó ante las autoridades todo lo que hizo. Cuando llegaron los uniformados a la vivienda se encontraron con los cuerpos en estado de descomposición, junto al arma que fue utilizada para el asesinato.
Adolescente confesó que asesinó a toda su familia porque le quitaron el celular
El joven confesó, según los medios locales, que tomó la decisión de asesinarlos después que le quitaran el teléfono y decirle que era un “vago, por estar con el celular todo el día” y que por esa decisión no pudo presentar un trabajo en el colegio y fue el detonante para planificar el plan.
Así fue como el viernes en la mañana encontró el arma de su padre adoptivo y le disparó de un tiro en la nuca. Cuando la hermana de 16 años preguntó por el ruido, el adolescente fue hasta su habitación y le disparó en la cara. A la madre le disparo en la espalda.
Algunas fuentes aseguraron que el adolescente no quería matar a su hermana, pero lo hizo para que no quedaran testigos del hecho.
Sin embargo, dos días después de convivir con los cadáveres en su casa y de haber seguido con su vida normal, fue que decidió confesar el crimen ante las autoridades.
