El Ejército ha anunciado una profunda investigación sobre el trágico incidente que resultó en la muerte del capitán Juan Pablo Herrera Mazo y el sargento segundo Carlos Rojas Otavo, ambos pertenecientes al batallón de Selva No. 49 en La Tagua, Putumayo.
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Un soldado de servicio de centinela fue identificado como el agresor, utilizando su fusil de dotación para perpetrar el ataque antes de escapar con el arma. Dos soldados de igual forma, resultaron heridos y fueron estabilizados en el lugar antes de ser trasladados a un centro médico en Caquetá.
Soldado asesinó a un capitán y a un sargento con su fusil de dotación
El Ejército, en colaboración con la Infantería de Marina y la Policía Nacional, ha implementado un plan candado para localizar al soldado fugitivo y prevenir posibles riesgos para la población civil. Las autoridades judiciales ya se encuentran en el lugar para llevar a cabo investigaciones exhaustivas.
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Equipos interdisciplinarios y psicosociales de la Vigésima Séptima Brigada de Selva brindan apoyo a las familias afectadas en este difícil momento. La cooperación entre fuerzas armadas y autoridades civiles es crucial para esclarecer los hechos y garantizar la seguridad en la región.
Este es el comunicado del Ejército:
El Comando de la Sexta División se permite informar a la opinión pública que:
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1. En hechos que son materia de investigación y que tuvieron lugar en el Batallón de Selva No. 49, ubicado en La Tagua, Putumayo, un soldado regular que se encontraba prestando servicio de centinela habría asesinado al Capitán Juan Pablo Herrera Mazo y al Sargento Segundo Carlos Rojas Otavo y habría dejado herido a dos soldados más.
2. De acuerdo a las primeras informaciones este soldado habría accionado su fusil de dotación contra la humanidad del personal y escapado de la unidad militar con el arma de fuego.
3. El personal herido fue estabilizado en el lugar y trasladado vía helicoportada hacia un centro médico especializado del departamento de Caquetá, donde está siendo valorado.
4. De inmediato se activó de manera conjunta con la Infantería de Marina y coordinada con la Policía Nacional un plan candado que permita establecer el paradero del soldado y evitar posibles afectaciones y riesgos a la población civil.
5. Al lugar de los hechos se trasladaron las autoridades judiciales competentes para realizar los actos urgentes.
6. Desde el mismo momento en que se conoció el hecho, se desplegaron los equipos interdisciplinarios y psicosocial de la Vigésima Séptima Brigada de Selva para realizar el acompañamiento correspondiente a las familias del personal fallecido.
7. Lamentamos este hecho que hoy enluta a nuestro Ejército Nacional y enviamos un saludo de condolencia a los familiares y amigos de nuestros militares, elevando plegarias al Todopoderoso por su descanso eterno.
