Una niña de solo 10 años de que pasó sus vacaciones en Santa Marta regresó a su ciudad natal, Bucaramanga, con una bacteria que acabó con su vida en un mes. Solo después de su muerte se logró establecerlo.
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Para la familia Villamizar el viaje a Santa Marta había sido el deseo de pasar una vacaciones inolvidables, sin siquiera imaginar que sería el último viaje con su hija de 10 años, Stefanía, que durante el viaje disfrutó de bañarse cada día en la piscina del hotel en el que se hospedaron.
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Una bacteria acabó con la vida de una niña de 10 años que se contagió en Santa Marta
Cuando la familia regresó a su ciudad de origen, la niña empezó a tener dolor en uno de sus oídos, acompañado de vómitos y fiebre. Inicialmente los médicos creyeron que se trataba de una otitis, según el testimonio que le dio la madre, Tatiana González, a la revista Semana.
El tratamiento con antibiótico permitió que disminuyera la infección, pero tres semanas después empezaron las complicaciones más severas.
La niña no quería levantarse de la cama, le afectaba la luz y solicitó ayuda para ducharse y cuando estaba en el baño, Stefanía sufrió convulsiones. Por lo que de inmediato la llevaron a un centro asistencial, en donde permaneció hospitalizada durante 24 días.
Aunque los médicos hicieron todo lo posible por tratar la infección, que no entendían de dónde provenía, tuvieron que declararle la muerte cerebral y solo dos días después murió.
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Finalmente, la muerte de Stefanía fue causada por una meningitis, que ante las extrañas circunstancias fue el Instituto Nacional de Salud, INS, el que empezó a realizar los estudios para determinar qué fue lo que le produjo la inflamación de la membrana que recubre el cerebro y posteriormente su muerte.
Ahora, se asegura que es muy probablemente que la niña pudo contraer una infección en la piscina en la que se encontraba en Santa Marta lo que le causó todas las complicaciones y su posterior muerte.
