El pasado miércoles 8 de junio se registró una fuerte explosión en una vivienda ubicada en inmediaciones a la Universidad de Antioquia en Medellín, que le causó la muerte a una joven universitaria que manipulaba explosivos.
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Se trata de Stefany Orrego Bedoya, una estudiante de 19, que resultó con graves quemaduras en el accidente y a las pocas horas de haber recibido atención hospitalaria, falleció.
“Lamento profundamente la muerte de una joven cerca de la UdeA que en medió de la manipulación de explosivos ha dejado su vida, sus sueños, su causa. Propongo el fin definitivo del uso de explosivos en centros educativos. No pido mucho”, escribió en su momento el alcalde suspendido, Daniel Quintero, quien confirmó la noticia públicamente.
Por su parte, el brigadier general, Gustavo Franco, comandante de la Región de Policía Número 6, aclaro ese día cómo sucedieron los hechos. “En el barrio el Chagualo, de la ciudad de Medellín, se presenta una explosión. Unidades de la Policía Nacional acuden al lugar, a una vivienda en un tercer piso, con personal antiexplosivos y hace la verificación técnica del sitio. Preliminarmente la información que tenemos es que dicha explosión se genera por la acción de un artefacto explosivo artesanal improvisado. Producto de ello se genera la afectación de cuatro personas, entre ellos una mujer, los cuales fueron trasladados a los centros hospitalarios y están siendo atendidos en el momento”.
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Esa joven herida era Stefany, que no imaginó que perdería la vida manipulando explosivos artesanales improvisados.
A ella, sus familiares y amigos la recuerdan como una joven muy talentosa, llena de dones y apasionada por la defensa de los derechos humanos. Desde que tenía cinco años empezó a bailar ballet y ya hacía sus primeros intentos en la pintura. Además, “fue una estudiante destacada, que se esforzaba por obtener buenos resultados académicos”, señaló el periódico El Colombiano.
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En 2016 fue una de las primeras estudiantes de la academia de baile Diamonds, ubicada en Bello, y en sus ratos libres hacía pinturas al óleo que eran admiradas por muchos de sus seguidores en redes sociales.
Luego empezó a estudiar Química en la Universidad de Antioquia y ahí empezó a participar de los eventos en defensa de los derechos humanos y en las movilizaciones estudiantiles de la Universidad.
Su madre recordó al medio paisa que la joven hace varias semanas atrás decidió mudarse junto con otros compañeros a la residencia estudiantil donde ocurrió el accidente. Al parecer, la joven tomó la decisión porque la vivienda estaba cerca de la universidad y quedaba a pocas cuadras de la cervecería donde trabajaba, en El Poblado.
Para despedir a esta joven, sus amigos realizarán el 2 y 3 de julio, en la Casa de la Cultura de Bello, un homenaje.
“Somos conscientes de que si a uno le muestran una pared blanca con un punto negro, lo que más se ve es el punto negro. Pero queda la pared blanca, que es mucho más grande”, dijo a El Colombiano la madre de Stefany.