El pasado domingo 15 de junio de 2025, se llevó a cabo en más de 20 ciudades de Colombia la denominada Marcha del Silencio, una jornada de movilización ciudadana convocada como respuesta al aumento de los hechos violentos en el país, especialmente tras el atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay.
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La convocatoria buscó enviar un mensaje de unidad nacional y rechazo a la violencia política, sin distintivos partidistas, según insistieron los organizadores. Sin embargo, la jornada no estuvo exenta de polémica, principalmente por las reacciones de algunos líderes políticos que cuestionaron el rumbo que tomó la movilización.
Uno de los pronunciamientos más sonados fue el del exalcalde de Medellín, Daniel Quintero, quien utilizó sus redes sociales para manifestar su rechazo. A través de su cuenta en X (antes Twitter), escribió: “A la derecha colombiana le pidieron hacer una marcha del silencio por la unidad y la paz, y en apoyo a Miguel Uribe. A los minutos la habían convertido en la marcha del odio”.
Junto a su publicación, Quintero compartió un video en el que profundizó sus críticas. “No se puede dar lo que no se tiene. A la derecha colombiana le pidieron una sola cosa: liderar una marcha nacional por la unidad, la no violencia y el apoyo a Miguel Uribe. A los dos minutos ya la habían convertido en la marcha del odio”, afirmó.
El exmandatario agregó que la Marcha del Silencio se transformó en un espacio excluyente y polarizante, y señaló que fue utilizada para atacar al Gobierno Nacional. Como sustento, citó un informe del medio La Silla Vacía, donde se mencionó que figuras como María Fernanda Cabal y Vicky Dávila, entre las promotoras de la movilización, estarían entre quienes más han contribuido a la difusión de mensajes de odio en redes sociales.
“Excluido de la mitad del país, amenazado para que no fuera la gente que no fuera derecha y lanzado con signos polarizantes contra el Gobierno Nacional. Un informe de La Silla Vacía dice que vi que Dávila y Cabal están entre las personas que más han promovido el odio en Colombia”, expresó Quintero.
También cuestionó la coherencia de los convocantes, al afirmar que han sido recurrentes en la propagación de discursos agresivos. “280 trinos ha puesto cada uno marcados como mensajes de odio, 566 en total. Hay silencios que matan, por eso a esta marcha del silencio yo no voy”, sentenció.
En una publicación previa, Quintero invitó a sus seguidores a reflexionar sobre los verdaderos fines de la marcha, preguntando si era un llamado legítimo contra la violencia o una estrategia de politiquería. “¿Es una marcha con un objetivo noble? ¿Es una marcha para hablar mal del gobierno? ¿Es una marcha que busca darle un golpe de Estado al presidente Petro?”, planteó.
A pesar de las críticas, diferentes sectores políticos confirmaron su participación. En una carta abierta, figuras como Katherine Miranda, Juan Manuel Galán, Julia Miranda Londoño, Alejandro García Ríos, Juan Sebastián Gómez, Humberto de la Calle y Juan Daniel Oviedo reiteraron su respaldo a la movilización, defendiendo su carácter ciudadano y su enfoque en el rechazo a la violencia.