Las fiestas de fin de año suelen venir acompañadas de una combinación conocida: más reuniones, más comida y menos rutina. Novenas, cenas de empresa, intercambios de regalos y viajes en familia hacen que la agenda se llene y, muchas veces, los hábitos saludables queden en pausa.
Sin embargo, diciembre no tiene por qué ser sinónimo de excesos. Más que “portarse perfecto”, esta temporada invita a buscar un equilibrio consciente: elegir mejor los alimentos, cuidar las porciones y apoyarse en opciones con buen valor nutricional puede marcar la diferencia para cerrar el año con bienestar y comenzar enero sin cambios drásticos en la rutina.
Lácteos: aliados clave para una alimentación balanceada en diciembre
Más allá de su papel tradicional en la cocina, los lácteos aportan nutrientes esenciales como proteína de alta calidad, calcio, vitaminas y minerales, fundamentales para diversas funciones del organismo. Además, algunos lácteos fermentados —como el kéfir o el kumis— contienen probióticos que, consumidos de forma regular dentro de un estilo de vida balanceado, pueden contribuir al equilibrio de la microbiota intestinal.
Incluir estos alimentos en preparaciones sencillas permite mantener el sabor característico de las fiestas, sin dejar de lado el cuidado nutricional. Elegir recetas variadas, bebidas con buen aporte nutricional y evitar el consumo excesivo ayuda a disfrutar más de las celebraciones.
A continuación, un recetario práctico de Alpina con opciones fáciles, pensadas para las reuniones decembrinas y adaptadas a un enfoque de equilibrio.
1. Parfait navideño de Yogur Griego con manzana y canela
Ideal para: desayuno de fin de semana o merienda antes de una novena.
Ingredientes (2 porciones):
- 2 tazas de Yogurt Griego sabor natural
- 1 manzana en cubitos
- 2 cucharadas de avena en hojuelas o granola
- 1 cucharada de nueces o almendras picadas
- Canela en polvo al gusto
- Opcional: 1 cucharadita de miel o panela rallada
Preparación: Saltea la manzana con un poco de agua y canela hasta que esté suave. En vasos transparentes, arma capas de yogurt, avena o granola, manzana y nueces. Repite y termina con canela.
El Yogurt Griego aporta proteína de alta calidad que contribuye al mantenimiento muscular, mientras que la fruta y la avena suman fibra, haciendo de esta receta una opción completa y equilibrada.
2. Dip cremoso de Yogur Griego y Kéfir con vegetales crujientes
Ideal para: abrir la cena del 24 o del 31 de diciembre.
Ingredientes:
- 1 taza de Yogurt Griego sabor natural
- ½ taza de Kéfir Plus sabor natural
- Jugo de ½ limón
- 1 diente pequeño de ajo picado (opcional)
- Hierbas frescas al gusto
- Sal y pimienta
Preparación: Mezcla el yogurt con el kéfir hasta lograr una textura homogénea. Agrega el limón, el ajo, las hierbas y sazona. Sirve con bastones de zanahoria, pepino, apio y pimentón.
Esta preparación es una alternativa fresca a las mayonesas tradicionales y combina proteína con los beneficios de los lácteos fermentados, incluyendo probióticos que apoyan el equilibrio de la flora intestinal.
3. Natilla con leche semidescremada: un clásico con menos calorías
Ideal para: mantener la tradición navideña con un ajuste consciente.
Usar leche semidescremada y moderar el azúcar permite conservar la textura cremosa y el sabor característico de la natilla, reduciendo el aporte de grasa y calorías, sin perder los nutrientes propios de los lácteos.
4. Brochetas de queso fresco, tomate cherry y uvas
Ideal para: pasabocas en novenas, brindis o antes de la cena principal.
Estas brochetas combinan proteína y calcio del queso con la frescura de la fruta, en porciones pequeñas y fáciles de controlar. Son una opción práctica para alternar con preparaciones más calóricas durante las celebraciones.
5. Mousse de frutos rojos con Yogur Griego y Kumis
Ideal para: un postre frío después de la comida principal.
Esta receta integra lácteos y fruta en una textura cremosa, aportando proteína y otros nutrientes esenciales. Es una alternativa ligera para cerrar las comidas festivas sin renunciar al postre.

