La comediante Fabiola Posada, conocida como la ‘Gorda Fabiola’, deja un legado invaluable tras su partida, además de su esposo y tres hijos de dos matrimonios. A lo largo de su carrera, muchos de sus colegas la describieron como una figura materna, especialmente en el programa Sábados Felices, donde fue fundamental en el desarrollo de nuevos talentos en el humor; la Gorda luego de tener experiencias cercanas a la muerte le dejo algunas palabras a Polilla para que pudiera afrontar su fallecimiento.
PUBLICIDAD
Le puede interesar: “Me quedo con eso”: Piter Albeiro reveló la última nota de voz que le envió la Gorda Fabiola
Lamentablemente, en horas de la mañana, su familia compartió la noticia de su fallecimiento. Según fuentes cercanas, la humorista había sido hospitalizada hace tres días debido a una inflamación en una de sus piernas, Sin embargo, su estado de salud empeoró cuando una severa infección afectó sus sistemas respiratorio y cardiovascular que terminó en su fallecimiento.
En una entrevista para los Informantes en 2018, luego de quedar en coma, dio una entrevista hablando de como era su vida lidiando con sus problemas de salud. Luego de casi perder la vida tras una crisis cardiaca, la Gorda le dejó un conmovedor mensaje a su esposo Polilla, también comediante, sobre su amor, su matrimonio y lo que él haría en caso de que faltara su presencia.
La comediante afirmó: “nosotros decidimos reafirmar nuestra relación porque de verdad nos amamos, yo no sé que llegaré a significar yo para ‘Poli’ pero creo que él tampoco sabría quehacer donde su Gorda se le hubiera ido”.
La frase que la Gorda Fabiola pidió para su epitafio
La Gorda Fabiola antes del momento de su fallecimiento, había sufrido cuatro infartos y había declarado que vio la muerte de cerca cuando estuvo en coma; por esta misma razón la Gorda hablaba con cierta cercanía de la muerte y siempre preparó a su familia para este suceso. En un audio revelado por Lo Sé Todo, la Gordita afirmó: ”siempre he soñado con que mi tumba tenga un epitafio que diga: ‘descansa en paz alma mía, solo querías reir’. Ese me gustaría que fuera mi epitafio, pero quizá el gran legado que quisiera dejar y que entendieran primero que para todas las mujeres de tallas plus es que ellas también son bellas. Vuelvo y saco las mismas palabras, saquen provecho de ellas, para nosotras también hay espacio. Pero el mayor legado es que reír llorando es lo mejor que puede pasar”.