Durante el capítulo 31 del ‘Desafío XX’ se vivió mucha tensión, pues el reclamo de Dickson a Santiago por haber ganado un premio que ella considera que no merecía y la prueba en el box negro acabaría con uno de los romances en competencia.
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La prueba partía desde la plataforma superior abriéndose paso a través de un tubo con costales que debían quitar hasta llegar a una tapa asegurada con cadenas, luego cruzar un obstáculo de llantas hasta llegar a un segmento de equilibrio. Seguidamente por medio de una escalera debían subir a otra plataforma en la que tendrían que sacar un soporte en forma de arco ajustado por una extensa soga.
Al bajar de la plataforma debían armar una torre de cubos por los que tenía que subir hasta liberar una caja suspendida a 4 metros de altura por una cadena que debían desenroscar para sacar de ella tres esferas de metal, ponerlas sobre el arco y evitando que se cayeran para atravesar todo el box y llegar al punto de definición en las que debían encestarla al final de un tablero con obstáculos.
Darlyn de la casa Beta y Gaspar de la casa Omega fueron quienes lideraron la prueba en todo momento, por lo que se quedaron con los primeros cupos de salvación, mientras Mapi de Alpha continuaba en una prueba hecha de capitanas para asegurar su estancia. Anamar de Omega logró remontar, y pese a que logró definir sin dificultad quedó eliminada por Mapi.
Al finalizar la prueba y conocer el resultado la presentadora Andrea Serna le preguntó sobre los diversos proyectos que tiene, pues es de recordar que Anamar es auxiliar de vuelo y renunció a su trabajo para sumarse al reto del ‘Desafío XX’.
“Yo tengo en Medellín una fundación viajando por los niños, me gustaría hacer otra fundación para los habitantes de calle y para los perritos”
— Anamar
Pero entre las preguntas también surgió una sobre lo que pasará con Renzo, pues la exparticipante sostuvo un romance con el modelo que los llevó incluso a pasar una noche en ‘El Cubo’.
“Quizá faltó un poco de tiempo, pero la verdad en el poco tiempo que compartimos conectamos mucho, somos muy iguales, todo lo hablamos claro, los dos sabemos el objetivo, y nada, esperar qué pasa afuera, pero si Dios quiere pues todo es el plan de Él, y si se da algo bonito estoy dispuesta y él también”
— Anamar
