Nuevamente la comediante ha sorprendido a todos con un audio viral en el que La Gordita Fabiola sabe perfectamente cómo identificar cuáles son los signos de que su hijo se perderá el fin de semana.
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“Hoy es viernes David, hoy es viernes. Yo te conozco a ti perfectamente. Te pegan una llamada y el cu… te empieza a hacer como una alarma pi… pi… pi… pi… pi… te largas y me dejas sola como siempre”, dice en el audio.
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Como era de esperarse su hijo reaccionó a la publicación asegurándole a todos que él no es así, y en la que en el pie del video ella escribió “¡Los regaños que le pego a mi hijo! ¿Qué tal yo de mamá intensa?”.
Los seguidores de la artista tampoco se quedaron atrás y llenaron el post de decenas de comentarios entre los que resaltan situaciones muy similares que han vivido junto a sus hijos.
“Yo era una mamá muy regañona, pero así supe sacar 4 hijas con buen ejemplo y buenas costumbres porque a uno lo criaron no más con la mirada de los ojos y uno ya sabía cómo era la vaina soy santandereana de Bucaramanga”.
Cuando los hijos salen y los padres quedan solos
La publicación de La Gordita Fabiola da pie, tal como ella lo escribe en la descripción del video y en el audio, al interesante tema de cuando los hijos comienzan a vivir su libertad. Pese a que solo era una broma y no es el caso de la comediante, en muchas familias si pasa algo similar.
Los hijos por naturaleza odian las restricciones de su horario porque lo relacionan con el control o la confianza. Un límite de horario o salida es un reflejo de su preocupación por la seguridad y el bienestar de su hijo, por lo tanto, hay que presentarlo como tal.
Es posible que su hijo adolescente lo presione con argumentos enmarcados en la restricción, por lo que debe responder que no desea que le pase algo malo, que se preocupa por él o ella, y quiere ayudarle a estar a salvo.