El exfutbolista colombiano Faustino Asprilla usó sus redes sociales para expresar de indignación y preocupación por las condiciones del sistema de salud en Tuluá, Valle del Cauca, luego de que su padre, Diego Asprilla, de 92 años, viviera una crítica situación médica en una IPS de la ciudad.
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A través de un video publicado en su cuenta de Instagram, el exjugador relató que su padre se descompensó y tuvo que ser trasladado de urgencia al Hospital Tomás Uribe Uribe. Allí, según su testimonio, estuvo al borde de la muerte debido al colapso del centro médico y las condiciones precarias del servicio.
“Estas son las condiciones de los hospitales de Tuluá, que está colapsado. Les tengo que contar la historia de lo que le pasó a mi papá, la tristeza que se está viviendo aquí en Tuluá, es una cosa muy berraca”, expresó visiblemente afectado. El exdelantero, reconocido por su paso por la Selección Colombia y clubes internacionales, criticó duramente la situación que enfrentan los pacientes en el municipio y pidió atención urgente a las autoridades competentes.
Además, el jugador expresó su molestia en redes sociales diciendo: “Casi lo dejan morir aquí, porque las EPS están intervenidas y mire el problema, un señor de 92 años”.
¿Qué dijo el hospital sobre la situación?
El Hospital Tomás Uribe Uribe respondió con un comunicado en el que negó las afirmaciones hechas por Asprilla. Según la institución, la expresión “casi se muere”, pronunciada públicamente por el exfutbolista en relación con su padre, no se ajusta a la realidad médica ni al procedimiento de atención que recibió el paciente.
“La frase ‘casi se muere’, expresada públicamente por un reconocido exfutbolista colombiano en referencia a su padre, NO corresponde a la realidad clínica ni al proceso de atención prestado al usuario“.