Atlético Bucaramanga ha sido uno de los equipos de moda durante el tiempo reciente dentro del Fútbol Profesional Colombiano, esto, gracias a su título de liga obtenido en el primer semestre del 2024 contra Independiente Santa Fe de forma heroica, siendo la primera copa en la historia del equipo y una de las alegrías más grandes para sus miles de hinchas, quienes soportaron más de 70 años la sequía del triunfo.
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Con esta obtención, el club escribió su nombre en la fase de grupos de la Copa Libertadores del 2025, disputándola en uno de los grupos más complejos de la edición, compartiendo zona con Racing Club de Avellaneda, reciente campeón de la Sudamericana, además de Colo Colo de Chile y Fortaleza de Brasil, equipos que se convirtieron en los visitantes ideales en el estadio Américo Montanini, aunque todos le sacaron puntos al onceno colombiano.
Pese a los esfuerzos del equipo para acceder a octavos de final, y después de haber tenido un rendimiento bastante decente teniendo en cuenta el empate en Brasil y la victoria en Argentina, el equipo se quedó en la tercera casilla, cayendo a la Copa Sudamericana y asumiendo un nuevo reto que parece bastante complejo, el de dejar en el camino a nada más y nada menos que el Atlético Mineiro de Hulk y compañía.
Para esto, los dirigentes están preparando la palntilla de cara al segundo semestre del año, aunque está claro que los brasileños no se van a quedar atrás. De hecho, ya se conoce que están negociando la compra de Juan Camilo Portilla, volante colombiano y referente del América de Cali que juega hace varios meses en Talleres de Argentina con un nivel destacable, mismo que lo ha llevado a la Selección Colombia.

