En video quedó registrada la graciosa jugada que le da la vuelta al mundo del fútbol. El jugador brasilero Henrique Dourado de Henan Songshan Longmen, equipo de primera división en China, chocó por la espalda al árbitro Ning Ma y lo tiró al suelo. El futbolista fue expulsado y deberá pagar una alta sanción económica.
PUBLICIDAD
Vea también: “Guess who’s back”, Al Rayyan confirmó que James por fin volvió a entrenar
En el partido que enfrentó a Henan Songshan Longmen con Wuhan Yangtze River se dio esta polémica jugada. El equipo de Dourado caía dos goles por cero desde el minuto nueve. El jugador parecía no estar de acuerdo con las decisiones arbitrales y su manera de protestar fue bastante particular.
El árbitro de espalda al brasilero sintió cómo lo atropellaban , cuando reaccionó ya estaba en el suelo. Dejó correr la jugada y tan pronto se interrumpió la acción, llamó a Henrique.
El brasilero se olvidó de un pequeño detalle: El partido contaba con la asistencia del ‘VAR’ y desde las pantallas le confirmaron a Ma la intención vehemente del jugador por chocarlo. El réferi no dudó un instante en expulsarlo.
Así fue la peculiar acción:
Vea acá: Néstor Lorenzo llamó a cuatro arqueros del FPC para microciclo: ¿quiénes son?
PUBLICIDAD
¿Cuál fue la sanción que recibió Henrique Dourado?
La Federación China de Fútbol tomó ‘cartas en el asunto’ y sancionó fuertemente al jugador por su ‘chiste’.
En primer lugar, Henrique Dourado no podrá jugar por 12 meses y adicionalmente deberá pagar una multa equivalente a 30.000 dólares.
“Se espera que todas las partes puedan salvaguardar conjuntamente el orden de la competición y el ambiente de desarrollo del fútbol”, agregó la Federación.
El jugador de 32 años corrió con la suerte que la acción tuvo lugar en el medio campo de la cancha, porque en caso de haber derribado al réferi en su área, además de la expulsión, el árbitro hubiera pitado penal en favor del equipo rival.
Particularmente, después de esta acción, el Henan Songshan Longmen empezó a jugar mejor y el compromiso finalizó en empate a dos goles, pero el marcador pasó a un segundo plano gracias a la jugada que le da la vuelta al mundo.
