Un hecho sin precedentes se presentó este martes en la Liga de Concacaf, en el que Ronnie Brunswijk, vicepresidente de Surinam, se convirtió en el jugador más longevo en actuar a nivel de clubes.
El político fue el capitán del Inter Moengotapoe en la derrota como local 0-6 ante el Olimpia de Honduras. El hombre de 60 años salió como capitán al terreno de juego y fue el centro delantero de su equipo. Su hijo también actuó en el partido.
Brunswijk es el propietario y presidente de la institución, razón de peso para incluirse en dicho rol.
La actuación del vicepresidente de Surinam tuvo particular atención en la transmisión del partido.
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Más allá del hecho histórico, el personaje en cuestión tiene un pasado bastante particular. Varios medios internacionales dicen que tiene 50 hijos.
Brunswijk inició su acercamiento a la política como guardaespaldas del expresidente vitalicio Desi Bouterse. Tras romper esa relación se dice que robó un banco y montó una guerrilla que posteriormente se convirtió en partido político del que era uno de sus líderes.
Entre otras, el veterano jugador y vicepresidente no podrá disputar el partido de vuelta por no poder salir del país debido a la circular roja que la Interpol tiene en su contra.