Resumen y goles Liverpool vs Real Madrid en Champions League hoy
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¡Esto es Anfield! Aunque no tenga gente en las tribunas producto de un virus que calló el ruido, pero no la pasión, el templo de Merseyside tiene esa mística que hace que Liverpool confíe. Incluso en los peores momentos, como este en que el equipo local estaba 3-1 abajo ante el encopetado Real Madrid.
Respetando ese escudo, Liverpool salió a hacer posible el milagro. La enjundia con la que salió desde el vamos el equipo de Jürgen Klopp, a ritmo de heavy metal, hizo que el olor a remontada se sintiera en Anfield. Sin embargo, alguien se tapó las fosas nasales y con insensibilidad le cerró las puertas a los Rojos: Thibaut Courtois.
Desde el minuto uno, el belga le avisó a los delanteros rivales que era su noche, negándole goles casi hechos a Mo Salah y James Milner en apenas diez minutos de juego. Las atajadas del portero aplacaron la rebeldía roja, que aunque superior en los primeros minutos siempre chocaba contra un frontón.
Vea también: ¡La impresionante atajada de Courtois en Anfield!
Para colmo, la mala puntería también hacía lo suyo. Georginio Wijnaldum y el mismo Salah pudieron apretar el marcador global, pero a sus remates les faltó tiza. Al Liverpool se le agotaba el tiempo y a falta de 45 minutos de 180 posibles, seguía dos goles por debajo.
Del Real Madrid se vio su cara menos lúcida. No es que jugara mal, pero sí resignó atacar. Con un recaudo de dos goles, el equipo de Zinedine Zidane apeló a las contras aisladas de Vinicius Junior y Karim Benzema, no tan finos como en la ida. La clasificación se conseguía, aunque no con mucha ambición.
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‘All in’. A falta de media hora, Klopp jugó sus restos metiendo a Thiago y Diogo Jota. Era el momento de todo o nada. Sin embargo, a veces más es menos. La voracidad británica se fue apagando con los cambios y cada vez el Madrid se fue sintiendo más cómodo.
Con la vergüenza de un campeón, Liverpool lo intentó hasta el último minuto. Pero en su interior sabía que cada que expiraba el tiempo, su destino era uno solo y bien librado se lo tuvo. El Madrid le enseñó la puerta de salida y de paso, le apagó la luz mientras caminaba solo en la oscuridad.
Courtois retro, edición 2018
Aquel portero que nos dejó boquiabiertos a todos en Rusia otra vez volvió a robarse el show. En un partido que el Real Madrid prefirió la cautela, el belga tuvo trabajo extra. La actitud del Liverpool solo pudo ser aplacada por las atajadas de Thibaut, que emuló aquella sensacional tapada ante Brasil, el día que despidió a la Verdeamarelha de la Copa del Mundo.
Esta vez el color al que le dijo “chao” fue al rojo. Las atajadas ante Salah y Milner sostuvieron al Madrid en el peor momento. Siempre se mostró firme, sin dar rebotes innecesarios y avisando que el equipo de Zidane no solo tiene magia con Benzema, inteligencia con Modric, liderazgo con Ramos, sino que él puede echar una mano de ser necesario. En realidad dos manos.