Una popular frase reza que “los sueños se hacen realidad”. Pero no llegan solos. Para ello, es necesario esfuerzo, sacrificio, entrega, amor, seriedad y profesionalismo, o sino que lo diga María Camila Osorio.
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En 2015, cuando consiguió la medalla de plata en los Juegos Nacionales, la cucuteña ya daba indicios de lo que podría suceder en el futuro. Y no decepcionó. Desde entonces, su carrera ha estado inundada de alegrías.
Además de haber integrado la selección Colombia de la FedCup en repetidas ocasiones, fue medalla de bronce en sencillos y plata en dobles mixtos en los Juegos Olímpicos de la Juventud 2018, que se disputaron en Buenos Aires.
Sin embargo, no fue lo único. También en 2018, haciendo pareja con Mariana Duque, se colgó la presea de plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, llevados a cabo en Barranquilla.
Y llegó la cereza del pastel. El 2019 fue un año para enmarcar. Además de haberse convertido en la número cuatro del mundo en el ranking juvenil, se coronó campeona del US Open Junior, derrotando por 6-1 y 6-0 a Alexandra Yepifanova.
Mejor manera de cerrar su ciclo como juvenil, imposible. Ahora, era momento de pensar más en grande de lo habitual. Envalentonada y con motivación, el 2020 se convirtió en su primera temporada como profesional.
La pandemia hizo que su debut a este nivel fuera atípico. No obstante, no fue impedimento para absolutamente nada. María Camila continuó su preparación, regresó a las canchas y, poco a poco, fue recuperando su buen tenis.
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Después de haber quedado a una qualy de ingresar al cuadro principal del Australian Open y de una gira por Estados Unidos y México, donde los resultados no desentonaron y su juego convenció, sucedió lo soñado.
Bogotá fue testigo de un hecho histórico. María Camila Osorio Serrano, nacida el 22 de diciembre de 2001 en Cúcuta, ganó la Copa Colsanitas, primer título WTA para ella, permitiéndole alcanzar su ranking más alto (135º).
¿Quién es Ricardo Sánchez, entrenador y artífice de esta gesta?
Hablar de Ricardo Sánchez es hablar de grandes entrenadores. En 2008, protagonizó uno de sus mayores logros luego de que Jelena Jankovic, su pupila, alcanzara la cima del ranking. Ahora, con María Camila sueña con hacer lo mismo.
Con la conseguida por Osorio Serrano, el profesor Sánchez ganó su cuarta Copa Colsanitas. Recordemos que en 2002, 2003 y 2004 lo había hecho con la extenista colombiana, Fabiola Zuluaga.
