Los lujosos bienes que le incautaron a ‘Manicomio’, piloto de narcotraficantes colombianos

Fincas, apartamentos y casas de campo en lujosos condominios hacen parte de los bienes que las autoridades le incautaron a Juan Carlos Ramírez Taborda, conocido como ‘Manicomio».

La fortuna con la que Ramírez Taborda adquirió sus propiedades provino de las actividades ilícitas que realizó desde 2001 hasta 2010, cuando prestó sus servicios de piloto para transportar droga a Estados Unidos por orden de varios narcotraficantes colombianos. 

En total, la Fiscalía y la Policía Nacional le decomisaron 6330 bienes avaluados en más de $66 mil millones. Entre ellos hay 43 inmuebles, que cuestan alrededor de $54 mil millones, y 6287 semovientes, cuyo valor supera los $12 mil millones.

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«Los bienes fueron ocupados en procedimientos simultáneos realizados en Villavicencio, Acacías, Restrepo y San Carlos de Guaroa (Meta); Puerto Nare y Puerto Triunfo (Antioquia); Maní (Casanare); Sabana de Torres (Santander), y Ricaurte (Cundinamarca)», explicó la Fiscalía en un comunicado.

De acuerdo con el ente investigador, entre la propiedades sobresalen haciendas ganaderas de más de 300 hectáreas en el Meta, en las que ‘Manicomio’ tenía la mayor cantidad de cabezas de ganado. También se hallaron ocho fincas que tenían medidas cautelares desde 2015, pero que seguían siendo usufructuadas por los familiares del piloto.

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Ramírez Taborda fue apodado ‘Manicomio’ porque piloteaba aeronaves de forma arriesgada al servicio del narcotráfico en las organizaciones de Daniel ‘El loco’ Barrera y Pedro Oliverio Guerrero, alias ‘Cuchillo’.

Según las investigaciones, el piloto logró consolidar una flotilla de más de 40 pilotos que transportaban estupefacientes desde pistas clandestinas en Venezuela hasta países de Centroamérica e islas del Caribe, antes de entregar los cargamentos en Estados Unidos.

En 2010, luego de nueve años de cometer actos ilícitos, se entregó a la justicia de Estados Unidos y pagó nueve años de prisión por el tráfico de toneladas de cocaína. El 29 de abril de este año regresó a Colombia.

Por lo pronto, los bienes incautados quedaron a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE).

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