El establecimiento nocturno Before Club, ubicado en la zona de Chapinero en Bogotá, continúa en el centro de la discusión pública tras su cierre temporal durante la madrugada del sábado 8 de noviembre. El bar fue el lugar donde salió por última vez el joven universitario Jaime Esteban Moreno y en sus cercanías se dio la riña y la golpiza, que lo llevó a la muerte el pasado 31 de octubre en medio del Halloween, cuyos sospechosos Juan Carlos Suárez y Ricardo González están detenidos. La medida fue adoptada por la Secretaría Distrital de Salud como resultado de un operativo de inspección, vigilancia y control en el que participaron diferentes entidades del Distrito. Sin embargo, la administración del club expresó su fuerte inconformidad con la decisión y aseguró que la sanción fue desproporcionada frente a lo hallado en el lugar.
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A través de un comunicado oficial y un video difundido en redes sociales, Andrés Solano Bautista, uno de los propietarios del establecimiento, afirmó que la medida preventiva se tomó basándose únicamente en una observación menor: “En un espacio de 4.500 m² encontraron dos heces de ratón”, señaló, cuestionando la proporcionalidad del sellamiento. Según Solano, la inspección se realizó en todo el edificio y la presencia de residuos se habría detectado debajo de una nevera que no contenía alimentos, sino únicamente productos embotellados.
Propietarios de Before Club califican de desproporcionado el sellamiento ordenado por la Secretaría de Salud
La administración de Before Club insistió en que la medida no fue motivada por problemas relacionados con capacidad de ocupación, seguridad estructural o documentación administrativa. De hecho, en el comunicado se indicó que durante el operativo participaron la Policía Nacional, el Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá y la Alcaldía Local de Chapinero, entidades que, según el establecimiento, certificaron que los permisos y documentos requeridos estaban en regla.
Los administradores también señalaron que el establecimiento cuenta con procesos regulares de control de plagas, respaldados por certificaciones expedidas recientemente por empresas especializadas. “Las empresas de control ambiental no certifican la eliminación total de plagas, porque eso es imposible, pero sí certifican su control, y nosotros cumplimos con eso”, afirmó la dirección de Before Club en su pronunciamiento.
No obstante, y pese a esa postura, el Distrito sostuvo una versión distinta sobre lo ocurrido. La Secretaría de Gobierno señaló que el operativo no solo respondió a hallazgos sanitarios, sino también a posibles riesgos en materia de seguridad interna. Según el concepto técnico emitido por el Cuerpo de Bomberos, el establecimiento presentaba fallas en los sistemas de protección contra incendios y no cumplía con ciertos requisitos de seguridad humana.
En cuanto a las condiciones sanitarias, la Secretaría Distrital de Salud reportó deficiencias que justificaban la medida preventiva. Con base en ello, la Policía Nacional aplicó el artículo 94 del Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana (Ley 1801 de 2016), que permite imponer sanciones cuando se incumplen normas de salud pública en establecimientos abiertos al público.
Como resultado, se ordenó la suspensión temporal de la actividad económica por tres días y se impuso una multa tipo 4, equivalente a $759.200. La administración distrital reiteró que la decisión se basó en criterios técnicos, no arbitrarios.
Sin embargo, para el propietario del club, la medida constituye un precedente preocupante. En el video difundido en sus plataformas, Solano expresó: “Como vieron que por Bomberos o Alcaldía no pudieron hacerlo porque cumplimos a cabalidad, entonces ahora por dos heces debajo de una nevera cierran un edificio. Es un abuso de poder. La documentación estaba en regla y entregamos certificación de control de plagas”.
Este caso se suma a una coyuntura en la que los establecimientos de entretenimiento nocturno en Bogotá han sido objeto de mayor vigilancia, en medio de discusiones sobre salubridad, convivencia y responsabilidad empresarial.
La administración de Before Club anunció que, tras cumplir los tres días de sellamiento, el lugar reabrirá al público el jueves 13 de noviembre, asegurando que continuará colaborando con las autoridades y fortaleciendo sus protocolos sanitarios y de seguridad.
Mientras tanto, el debate continúa en redes sociales, donde usuarios han expresado opiniones divididas. Algunos consideran la medida necesaria para garantizar condiciones higiénicas y seguras en espacios de alta afluencia; otros, en cambio, señalan un presunto exceso de autoridad y piden mayor claridad en los criterios de inspección.

