Bogotá y su región metropolitana están a punto de experimentar una revolución en su sistema de transporte público. Mientras la Línea 1 del Metro de Bogotá avanza lentamente hacia su entrega en 2028, el Regiotram de Occidente se consolida como la gran promesa de la movilidad moderna: será entregado un año antes, en 2027.
Así lo confirmó el gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, quien anunció que el proyecto ya comenzó con las obras de adecuación del antiguo corredor férreo entre Facatativá y Bogotá. Este tren ligero será el primero de su tipo en Colombia, con una capacidad proyectada para movilizar a más de 140.000 personas diariamente.
¿Por qué el Regiotram será entregado antes que el metro?
A diferencia del metro, cuyas obras aún están en fases iniciales en algunos tramos, el Regiotram ya ejecuta la remoción de 70 kilómetros de rieles antiguos e instala 174 kilómetros de nueva infraestructura férrea. Además, se construyen simultáneamente 17 estaciones distribuidas entre Facatativá, Madrid, Mosquera, Funza y Bogotá.
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Según el cronograma oficial, la primera fase —entre Facatativá y Fontibón— estará lista en 2027, lo que beneficiará a miles de usuarios que actualmente enfrentan trancones diarios por la congestionada calle 13. En comparación, la Línea 1 del Metro de Bogotá solo comenzaría operaciones en marzo de 2028, con su fase completa proyectada para 2029.
Una conexión clave para Bogotá y Cundinamarca
El Regiotram será clave no solo para descongestionar vías, sino para fomentar un transporte limpio, moderno y eficiente. Su diseño contempla una integración física con el metro de Bogotá en la intersección de la calle 26 con Caracas, lo que permitirá a los usuarios conectar fácilmente ambos sistemas.
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Durante el desarrollo del proyecto, se ha movilizado maquinaria pesada, incluyendo más de 20 grúas industriales, todas coordinadas desde el patio taller El Corzo, epicentro de la operación ferroviaria.
Con este avance, el Regiotram de Occidente se perfila como la alternativa que le ganará en tiempo al metro de Bogotá, transformando la rutina de miles de personas que hoy pierden horas en buses saturados y trancones.
Este ambicioso tren ligero representa una inversión en el futuro sostenible de la región y pone a Cundinamarca a la vanguardia en soluciones de transporte público.