En la tarde de este sábado 7 de junio, un atentado armado conmocionó a los asistentes de un evento político en el barrio Modelia, occidente de Bogotá, cuando el precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay fue herido de bala en la cabeza mientras pronunciaba un discurso.
Los videos del atentado, que rápidamente se viralizaron en redes sociales, captan el instante exacto en que Uribe es atacado por la espalda. En las imágenes se ve cómo los disparos lo impactan directamente en la cabeza, mientras él hablaba frente a una multitud. El pánico se apodera del público y, segundos después, ciudadanos desesperados corren hacia el candidato, quien yace en el suelo envuelto en sangre.
Para leer: Atentan contra la vida del candidato presidencial Miguel Uribe en Bogotá
Uno de los registros más dramáticos muestra a varias personas levantando al político gravemente herido para trasladarlo, mientras otros gritan por ayuda. La escena refleja la gravedad del ataque y la impotencia de los asistentes ante la violencia.
Atentado contra Miguel Uribe: le disparan en la cabeza durante discurso político en Bogotá
El ataque ocurrió en la intersección de la carrera 80 con calle 23. Según confirmó su equipo de campaña, dos hombres armados perpetraron el atentado. Posteriormente, se conoció que uno de los presuntos responsables es un menor de edad, quien ya fue capturado por las autoridades.
Aunque no se ha emitido un parte médico oficial, fuentes de Blu Radio señalaron que Miguel Uribe Turbay fue trasladado a un centro hospitalario con signos vitales, pero en estado delicado. La Policía y la Fiscalía ya trabajan en las investigaciones para esclarecer los móviles del atentado y determinar si tuvo motivaciones políticas.
El hecho ha generado un rechazo generalizado en el país. Desde el Centro Democrático, dirigentes han condenado enérgicamente el atentado, exigiendo garantías para el ejercicio democrático. Álvaro Uribe Vélez, expresidente y líder del partido, manifestó su solidaridad y pidió una acción inmediata por parte del Gobierno.
Este nuevo episodio de violencia política reaviva el debate sobre la seguridad de los candidatos presidenciales en Colombia y evidencia la urgente necesidad de reforzar las garantías para el desarrollo de las campañas en un entorno democrático.

