La Secretaría de Gobierno de Bogotá, liderada por Gustavo Quintero, confirmó que los establecimientos nocturnos tendrán permitido operar hasta las 5:00 a.m. los fines de semana y días festivos. Esta decisión hace parte de la estrategia “Bogotá Productiva 24 Horas”, una apuesta por fortalecer la economía nocturna, el turismo, y ofrecer más alternativas de ocio y cultura para los habitantes y visitantes de la ciudad.
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La medida fue anunciada luego de varias mesas de trabajo con representantes del sector del entretenimiento, la Policía Metropolitana, la Secretaría de Seguridad, y el Instituto Distrital de Turismo (IDT). El objetivo es consolidar a Bogotá como una ciudad viva, segura y competitiva durante la noche, equiparándola con otras grandes urbes del mundo.
Según datos de la Secretaría de Desarrollo Económico, la economía nocturna podría representar hasta el 22,4% del PIB de Bogotá, un porcentaje significativo que refleja su potencial como motor económico. Además, se estima que el empleo nocturno representa alrededor del 17,7% del total del empleo en la ciudad, especialmente en sectores como bares, discotecas, restaurantes, transporte, cultura y recreación.
Un estudio citado por la Cámara de Comercio de Bogotá y replicado en La República, revela que la industria nocturna colombiana mueve aproximadamente $3 billones anuales, y solo en Bogotá se generan más de 34.000 empleos directos vinculados a la vida nocturna. Durante los fines de semana, esta cifra puede aumentar con otros 30.000 empleos temporales o indirectos, beneficiando especialmente a los jóvenes, mujeres y trabajadores informales.
Para garantizar la seguridad ciudadana durante estas nuevas jornadas extendidas, la administración distrital ha previsto una serie de operativos de Inspección, Vigilancia y Control (IVC) en conjunto con la Policía Metropolitana de Bogotá, el Ejército Nacional, y los frentes locales de seguridad. Estos operativos se enfocarán en establecimientos de alto impacto, zonas de alta afluencia y corredores estratégicos como la Zona T, la Zona Rosa, Chapinero, Teusaquillo y el centro histórico de La Candelaria.
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Además, se trabajará en la regulación del ruido, la movilidad segura, la prevención del consumo de alcohol en menores, y el fortalecimiento de la Red de Cuido, una estrategia para cuidar de manera integral a quienes disfrutan de la noche en la ciudad.
La alcaldía también ha señalado que este plan se implementará de forma progresiva y controlada, permitiendo hacer evaluaciones periódicas sobre su impacto económico, social y en materia de seguridad. La decisión es celebrada por los gremios del sector nocturno, que ven en esta apertura una oportunidad para recuperarse económicamente tras los efectos de la pandemia y potenciar el crecimiento en 2025.
Con esta política, Bogotá busca reafirmar su intención de convertirse en una ciudad vibrante, segura e incluyente, donde la vida nocturna sea vista no solo como una fuente de diversión, sino como una palanca estratégica de desarrollo para miles de ciudadanos.