Un aparatoso sicariato en Barranquilla estremeció la mañana de este viernes al norte de la ciudad, luego de que un hombre identificado como Néstor Moisés Santamaría Bastidas fuera asesinado dentro de una camioneta de alta gama en el reconocido barrio Miramar. El ataque, ejecutado con precisión y a plena luz del día, dejó además un herido y encendió las alarmas de las autoridades por la forma en que ocurrió el crimen.
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Los hechos se registraron en la transversal 44 con calle 105, donde la víctima se movilizaba en una Toyota Prado de placas IWY-619, en compañía de Luis Carlos Navarro Muñoz. Según las primeras versiones, minutos antes del atentado, Santamaría había sostenido una conversación con los ocupantes de una camioneta roja estacionada en la zona. Este encuentro llamó la atención de los investigadores, quienes ahora analizan si tiene relación directa con el crimen.
Sicarios atacan a plena luz del día en el norte de Barranquilla: un muerto y un herido en lujosa Toyota Prado
De acuerdo con información preliminar revelada por las autoridades, Néstor Moisés Santamaría registraba dos anotaciones judiciales, una como indiciado por homicidio en 2014 y otra por lesiones personales. Su acompañante, Luis Carlos Navarro, también contaba con antecedentes por violencia intrafamiliar y lesiones culposas, elementos que incrementan las hipótesis sobre un ataque selectivo y dirigido.
El atentado se produjo cuando una motocicleta Pulsar negra, donde se movilizaban los presuntos sicarios, se acercó al vehículo en el que ya se encontraba Santamaría. Sin mediar palabra, los delincuentes dispararon en repetidas ocasiones contra la camioneta. Testigos aseguran que los tiros fueron certeros y a muy corta distancia, lo que evidencia la planeación del ataque.
Santamaría murió de inmediato debido a una herida en la región intraventricular izquierda, además de múltiples lesiones en la zona mamaria escapular externa, producidas —según el reporte preliminar— por lo que serían perdigones. El impacto de los disparos no solo afectó órganos vitales, sino que no le permitió recibir ningún tipo de asistencia médica oportuna.
Por su parte, Luis Carlos Navarro resultó herido y fue trasladado de urgencia a la Clínica Portoazul, donde permanece bajo observación médica. Presenta una herida en el mentón y varias laceraciones en el cuerpo. Aunque su estado es estable, será pieza clave para esclarecer lo ocurrido y la posible motivación del ataque.
Según el reporte oficial entregado por las autoridades, las víctimas se dirigían hacia un gimnasio ubicado en la zona cuando fueron sorprendidas por los sicarios. La Unidad de Investigación Criminal analiza cámaras de seguridad y recopila testimonios para identificar a los responsables y determinar si el crimen está vinculado con los antecedentes judiciales de Santamaría o con algún conflicto reciente.
Este sicariato en el norte de Barranquilla vuelve a poner en debate la creciente modalidad de ataques en vehículos de alta gama y a plena luz del día, una práctica que preocupa a la ciudadanía y que refuerza la urgencia de estrategias más contundentes de seguridad en la ciudad.

