Han pasado más de 90 días desde la desaparición de Tatiana Alejandra Hernández Díaz en Cartagena, y el caso sigue sin resolverse. Ahora, una supuesta carta enviada a la Fiscalía General de la Nación ha generado un giro inesperado, al vincular su desaparición con actos de corrupción en el Hospital Naval de Cartagena (HONAC), donde la joven realizaba su internado obligatorio como estudiante de medicina.
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Tatiana, de 23 años, fue vista por última vez el 13 de abril en las cercanías de la avenida Santander, y desde entonces no se ha tenido rastro de su paradero. La carta, enviada el 10 de julio al fiscal Héctor Doney Toro, sugiere que la joven habría sido entregada a un grupo criminal conocido como “Los Z”, presuntamente como represalia por haber descubierto irregularidades en la compra de instrumentos quirúrgicos al interior del hospital.
Carta anónima sugiere que Tatiana Hernández fue entregada a red criminal por denunciar corrupción en hospital
El documento relata una llamada anónima recibida por un familiar de Tatiana un día antes, en la que se advertía que su vida podría estar en riesgo por los hallazgos que hizo en el HONAC. Además, en la misiva se mencionan nombres específicos de funcionarios presuntamente implicados en los hechos.
Ante esta grave acusación, la Armada Nacional emitió un comunicado oficial aclarando que, si bien no existen denuncias formales contra personal militar o civil del hospital, se iniciará de oficio una investigación interna. “Desde el primer momento en que se reportó su desaparición, hemos estado dispuestos a colaborar con las autoridades judiciales”, indicó la institución. También aclararon que Tatiana no estaba cumpliendo año rural, sino que estaba en rotación práctica, como estudiante de la Universidad Militar Nueva Granada.
La última imagen conocida de Tatiana fue captada en un video de seguridad, alrededor de las 4:30 p. m., donde se le ve sentada sobre unas rocas frente al mar, en la zona de Bocagrande. Días después, una compañera de universidad halló sus sandalias y su celular en ese mismo lugar.
Lucy Díaz, madre de la joven, ha sostenido desde el principio que su hija fue víctima de una trampa planeada. En entrevista con el medio Noticias Caracol, aseguró que la desaparición no fue un hecho fortuito, sino un acto deliberado. “Lo que sucedió ese día ya estaba planeado. Fue diez días antes de que ella regresara a Bogotá”, afirmó.
Lucy también señaló que en el sitio donde aparecieron los objetos de su hija hay cámaras que no funcionan, lo que levanta más sospechas. “La escena parecía manipulada, se lo dije a la Fiscalía”, recalcó. Según su testimonio, el GPS del celular fue clave para hallarlo, pero sospecha que fue colocado lejos del lugar real donde estuvo su hija. “Quien la llevó allí sabía del rastreo”, dijo.
La familia también ha sido blanco de llamadas extorsivas, donde delincuentes exigen dinero a cambio de información sobre el paradero de Tatiana. “Dicen que la tienen cerca de Cartagena y que si consignamos dinero, nos la pueden entregar”, relató su madre.
En un intento por reconstruir los hechos, tres compañeros de la Universidad Militar Nueva Granada viajaron a Cartagena para repetir el recorrido que habría hecho Tatiana el día de su desaparición. Por primera vez, las autoridades accedieron a tomar las sandalias encontradas como prueba. “Antes no las querían como evidencia, me las devolvieron mojadas y rayadas”, comentó Lucy.
A pesar de que se han hecho búsquedas con robots submarinos, no se ha obtenido ninguna pista concluyente. La madre mantiene la esperanza de encontrarla con vida. “Yo siento que Tatiana está viva y que está siendo retenida en contra de su voluntad”.
En los próximos días, la familia se reunirá con su abogado en Cartagena, quien adelanta gestiones ante la Fiscalía. “Queremos respuestas. No nos dicen nada, pero seguimos creyendo que vamos a encontrarla”, concluyó Lucy Díaz.