A pesar de la tenaz competencia, Netflix está afincado como el gigante de las plataformas de streaming con más de 220 millones de suscriptores en todo el mundo.
PUBLICIDAD
De acuerdo a Business Insider, alrededor de unos 100 millones de “hogares adicionales” disfrutan del servicio de entretenimiento mediante una contraseña compartida.
Dicha actividad no era algo que a la empresa pareciera importarle. De hecho, en el pasado, incluso alentaron la compartición de cuentas a través de sus redes sociales.
Sin embargo, tras la pérdida de usuarios por primera vez en una década el último trimestre, aunado a una caída de las ganancias, la empresa tomará medidas para controlar esta práctica.
Las medidas que adoptará Netflix para controlar la compartición de contraseñas
Con este fin, el pasado mes de marzo, la plataforma comenzó a probar una nueva estrategia en tres países latinoamericanos: Chile, Costa Rica y Perú.
La función permite a los usuarios agregar cuentas para un máximo de 2 personas, que pueden no vivir bajo el mismo techo, pero no será gratis, sino por el pago de una tarifa mensual extra.
De acuerdo a Xataka, el costo por una subcuenta se ubicó entre 2 y 3 dólares al mes en las naciones previamente mencionadas.
PUBLICIDAD
El objetivo es que el propietario de la cuenta cancele un cargo adicional por cada usuario adjunto, lo cual permitirá a la empresa compensar la pérdida de ganancias por esta práctica.
El director de operaciones de Netflix, Greg Peters, lo explicó así: “Si tienes una hermana, digamos, que vive en una ciudad diferente, y quieres compartir Netflix con ella, eso es genial”.
“<b>No estamos tratando de cerrar ese intercambio</b>” esclareció en la presentación de resultados trimestrales. “<b>Pero le vamos a pedir que pague un poco más para poder compartir con ella”</b>.
“Y para que obtenga el beneficio y el valor del servicio, pero también obtenemos los ingresos asociados con esa visualización”, añadió, según Business Insider.
¿Cómo serían las subcuentas de Netflix?
La ejecución de esta medida, según Xataka, hará que no se ocasione una compartición real. Y es que las subcuentas no solo tendrían su propio perfil y recomendaciones.
El cibersitio señala que dichos suscriptores asociados además contarían con su propio usuario y contraseña, los cuales serían diferentes a los del titular de la cuenta.
Con esta decisión, la empresa buscaría facilitar que los usuarios adjuntos migren más fácilmente al estatus de usuarios normales si deciden serlo y pagar por el servicio total.
Tanto su historial de visualizaciones, como su lista de contenidos, entre otros datos de su actividad en la plataforma, se sincronizarían con esa nueva cuenta propia e independiente.
¿Cuándo entrará en vigencia esta medida?
Netflix no ha precisado aún cuánto estima ganar con la táctica, pero sí adelantó la fecha para la entrada en vigencia de la función que amenaza la supervivencia de las cuentas compartidas.
De acuerdo a Peters, la implementación de estos cambios, que permitirá a la empresa monetizar mucho mejor la compartición de contraseñas, se dará a nivel mundial en 2023.
“Estamos tratando de encontrar un enfoque equilibrado”, declaró Peters en su carta a los accionistas, reproducida por Business Insider.
“Para establecer sus expectativas, creo que <b>vamos a pasar un año más o menos iterando y luego implementando todo eso para que podamos lanzar esa solución a nivel mundial,</b> incluidos mercados como Estados Unidos”.
“A medida que trabajamos para monetizar el intercambio, el crecimiento (del ingreso promedio por membresía), los ingresos y la visualización se convertirán en indicadores más importantes de nuestro éxito que el crecimiento de la membresía”, sentenció.
Cabe destacar que un estudio realizado por Time2Play, recogido por CNBC, arrojó que un 80% de americanos que usan Netflix con la contraseña de alguien más no se abrirían una cuenta propia.
Entonces se puede concluir que el gigante no registraría nuevos usuarios si eliminaran la opción de compartir la cuenta de tajo y la medida planteada parece ser la única solución hasta ahora.
Por supuesto, todavía hay muchas interrogantes por contestar al respecto, pero seguramente, se irán esclareciendo cuando el plan entre en marcha a nivel global el próximo año.
