Ante cualquier eventualidad en la vida, siempre hay que estar preparados. Y la NASA lo está, si pensamos en un asteroide que choque contra la Tierra.
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Es una preocupación constante, y para ello se ha invertido en observar el Universo desde cualquier punto en nuestro planeta y en el espacio inmediato.
“La detección temprana es clave”, indicó la Conferencia de Defensa Planetaria de 2021, donde los científicos recomendaron un mínimo de cinco a diez años de tiempo de preparación para una defensa exitosa contra asteroides peligrosos.
Pero, ¿qué hacer para mitigar cualquier desastre ocasionado por un asteroide? ¿Cómo prepararse y cómo enfrentarlo?
Medidas básicas frente a un asteroide
Svetla Ben-Itzhak, profesora asistente de Espacio y Relaciones Internacionales en la Escuela de Guerra Aérea de Estados Unidos escribió un artículo para The Conversation al respecto.
Ben-Itzhak señala cuatro elementos básicos para actuar frente a un asteroide:
- Impulsar políticas de auxilios regionales y medidas de evacuación. Es clave instruir a la población sobre el peligro del asteroide, realizando una evacuación lo más pronto posible.
- Enviar una nave espacial para volar cerca de un asteroide, si es de tamaño pequeño o mediano: la gravedad de la nave cambiaría lentamente la órbita del objeto.
- Si el objeto es más grande, se puede estrellar algo contra él a altas velocidades.
- Finalmente, el uso de una ojiva nuclear.
“Aprender más sobre de qué están hechos los asteroides amenazantes también es importante, ya que su composición puede afectar el éxito que tenemos al desviarlo”, destaca la experta.
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Lo más importante de todo: no se espera que un cuerpo peligroso golpee la Tierra en los próximos 100 años, pero la posibilidad no es cero. Hay que estar siempre prevenidos. Y para ello, la NASA lanzó la nave DART.
DART, la misión de prueba para prevenir el choque de un asteroide contra la Tierra
En noviembre de 2021, la NASA lanzó la primera misión de defensa planetaria a gran escala del mundo: la Prueba de Redirección de Asteroides Dobles, o nave espacial DART, por sus siglas en inglés.
La misión dirigida por la NASA contó con el apoyo del Laboratorio de Física Aplicada Johns Hopkins, el Jet Lab, el Centro de Vuelo Espacial Goddard, el Centro Espacial Johnson, el Centro de Investigación Glenn y el Langley.
“DART es una nave espacial diseñada para impactar contra un asteroide como prueba de tecnología”, define la agencia aeroespacial norteamericana al objeto de 610 kilogramos. Esta nave logrará la desviación cinética del impacto estrellándose deliberadamente contra la luna del asteroide Didymos, a una velocidad de 22.500 kilómetros por hora.
Este asteroide no es una amenaza para la Tierra, pero será utilizado como un campo de pruebas perfecto para ver “si estrellar intencionalmente una nave espacial contra un asteroides una forma efectiva de cambiar su curso, en caso de que se descubra uno que amenace la Tierra en el futuro”.
El Didymos cuenta aproximadamente con 780 metros de diámetro, y su luna es de aproximadamente 160 metros.
La nave DART cuenta con una cámara a bordo (DRACO) y un software de navegación autónoma. Explica la NASA que “la colisión cambiará la velocidad de la luna en su órbita alrededor del cuerpo principal en una fracción del 1%, pero esto cambiará el período orbital de la luna en varios minutos, lo suficiente para ser observado y medido con telescopios en la Tierra”.
Se espera que la nave espacial DART intercepte la luna de Didymos a finales de septiembre de 2022, cuando el asteroide y su luna estén a 11 millones de kilómetros de la Tierra. Esto permitirá observaciones con telescopios terrestres y radar planetario, para medir el cambio con el impulso dado con DART.
