La emergencia climática y la pérdida de biodiversidad son dos de los principales riesgos globales a mediano y largo plazo. Según el más reciente Informe de Riesgos del Foro Económico Mundial 2025. Es tiempo de actuar y debemos hacerlo con mayor ambición.
Puede leer: Opinión: Las putas también pueden llegar al poder
Adaptarnos a los cambios ambientales no es una opción, es una necesidad urgente. Pero para lograrlo, debemos primero reconocer la magnitud del desafío y, al mismo tiempo, actuar de manera propositiva, ya que todavía es posible cambiar el rumbo si actuamos con ambición.
A tan solo cinco años del cumplimiento de la Agenda 2030, sabemos que muchas de las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) no se alcanzarán en el tiempo previsto. Sin embargo, esta realidad debe impulsarnos a redoblar esfuerzos, a innovar, a sumar más aliados, y a enfocar nuestras acciones en iniciativas que tengan verdadero impacto.
Desde el Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD), casa matriz de CECODES, se propuso desde 2010 una hoja de ruta empresarial para lograr que en 2050 cuando seamos más de 9.500 millones de personas en el mundo, podamos vivir bien, dentro de los límites planetarios. Esta visión fue actualizada en 2021, y desde CECODES la adaptamos al contexto colombiano para construir la Visión 2050 Colombia, una ruta aterrizada para que el sector empresarial genere acción con propósito para cuando seamos más de 62 millones de colombianos.
Esta hoja de ruta está compuesta por nueve caminos de transformación: energía, transporte y movilidad, espacios para vivir, productos y materiales, servicios financieros, conectividad, salud y bienestar, agua y saneamiento, y alimentación. Y se materializa a través de cinco criterios clave que permiten pasar de la teoría a la práctica: cero emisiones netas de GEI, objetivos ambientales ambiciosos, compromiso con los derechos humanos, abordaje de la desigualdad con enfoque empresarial, y operación con los más altos estándares de transparencia.
Uno de los criterios donde hemos concentrado uno de nuestros mayores esfuerzos es en el de objetivos ambientales ambiciosos. A partir de la COP16, desde CECODES fortalecimos el trabajo junto al WBCSD para acompañar al sector empresarial en el cumplimiento de las metas 15 y 19 del Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal. Lo hicimos a partir de tres ejes estratégicos: definición de objetivos y métricas claras, acciones de naturaleza positiva, y la movilización de recursos financieros para acelerar la transformación.
El resultado de este trabajo colectivo es el documento “De la narrativa al impacto: Guía de biodiversidad para las empresas” que hoy ponemos a disposición del sector empresarial en Colombia, América Latina y Europa. Una herramienta construida junto con los nodos regionales de Chile, Guatemala, México, España y Perú, que busca integrar la biodiversidad en las estrategias y operaciones empresariales. Porque proteger la naturaleza no es solo una responsabilidad ética; es una condición para la sostenibilidad de los negocios y el bienestar de la sociedad.
Agradezco a todas las organizaciones que hicieron parte de este ejercicio, y muy especialmente a las empresas que compartieron sus experiencias, aprendizajes e iniciativas. Este documento es una muestra de lo que podemos lograr cuando el sector empresarial asume un liderazgo genuino en sostenibilidad.
Lea también: Opinión: ¿A quiénes vamos a subir al Congreso en Colombia?
Los invito a leer esta guía con mirada propositiva, en donde encontrarán 6 pasos claros, desde establecer la ambición; desarrollar capacidades en biodiversidad; comprender las oportunidades, dependencias, impactos, riesgos y oportunidades en biodiversidad; construir un programa de biodiversidad para la empresa; implementar y monitorear acciones prioritarias; y terminar comunicando y divulgando esta información. No se trata únicamente de cumplir metas internacionales. Se trata de liderar con impacto positivo, de hacer de la biodiversidad un eje central de la estrategia empresarial, y de demostrar que sí es posible hacer negocios de forma sostenible. Porque en este momento crucial de la historia, no basta con adaptarse: hay que transformarse.

