La discusión sobre el alza del salario mínimo para 2026 en Colombia empezó a calentarse en medio de la agitada agenda política del país. Desde ya los gremios empresariales y las centrales obreras están haciendo cuentas para llegar con una propuesta.
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Desde hace varias semanas, algunas versiones han señalado el Gobierno del presidente Gustavo Petro podría buscar que el alza sea superior al 10 %, tal y como pasó el año pasado. Sin embargo, el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, ha advertido que la cifra aún está en discusión.
“Yo no he dicho porcentaje. Yo he dicho que habrá un incremento que signifique un aumento real de los ingresos de los trabajos”, advirtió Sanguino en una entrevista reciente con la periodista María Jimena Duzán.
¿Qué se tiene en cuenta para definir el aumento del salario mínimo en Colombia?
Detrás de este proceso de fijación hay múltiples factores que deben tenerse en cuenta. Uno de ellos es la inflación proyectada. Es decir, en cuánto se incrementarán los precios de los bienes y servicios en 2025. De acuerdo con múltiples proyecciones, se espera una inflación de cerca del 5 % para 2025, lo que marca el piso para evitar pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores que venía mencionando el ministro.
Otro aspecto clave es la productividad de la economía, que, aunque modesta en los últimos años, se incluye como variable central para justificar incrementos reales por encima de la inflación.
La capacidad económica de las empresas también figura en la discusión, pues un aumento muy elevado podría afectar la generación de empleo formal o trasladarse a los precios, incrementando la inflación.
¿Cómo se define el alza del salario mínimo en Colombia?
En todo caso, se espera que haya un proceso de concertación mediante la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales, que es tripartita. Es decir, en ella tienen asiento tres partes: el Gobierno Nacional -que durante la administración Petro ha sido más cercana a los trabajadores- los empleadores y los representantes de los trabajadores.
Vale decir que el Gobierno en esa mesa funge como una especie de mediador y son los sindicatos y los empresarios quienes deben llegar a un acuerdo. Si esa concertación nunca se da, será el Gobierno el que defina el alza del salario mínimo por decreto.

