En la tarde de este lunes 27 de octubre, un asesinato sorprendió a la ciudadanía de Bogotá, luego de que un hombre de 52 años de edad fuera ultimado por un sicario que lo abordó cuando se encontraba al interior de un establecimiento comercial en inmediaciones del búnker de la Fiscalía y la Gobernación de Cundinamarca.
Lea también: Golpe a la mercancía ilegal y al alcohol adulterado en Bogotá: incautación avaluada en $270 millones
Fueron cuatro disparos los que realizó el asesino, uno de ellos impactó la cabeza de la víctima y lo dejó gravemente herido. En ese momento, policías y personas que se encontraban en el lugar trataron de auxiliarlo llevándolo a un centro hospitalario, sin embargo llegó sin signos vitales.
Inmediatamente investigadores del CTI de la Fiscalía, iniciaron las indagaciones, encontrando que el crimen pudo deberse a un ajuste de cuentas ya que el hombre asesinado, tendría historial delictivo.
El Tiempo pudo establecer la identidad de la víctima, especificando que su nombre era Carlos Yorelmy Duarte Díaz, un individuo con un prontuario criminal ya que a nivel internacional se le vincula con el lavado de activos en Argentina, mediante la compra y venta de jugadores de fútbol.
Igualmente, el mismo medio anteriormente mencionado evidenció que Duarte Díaz también es señalado con el envío a África de un cargamento de cocaína mezclado con arroz.
El diario El Clarín, uno de los más importantes en Argentina, documentó en 2016 que Carlos Yorelmy estaría lavando dinero proveniente del narcotráfico, más exactamente del ‘Clan Úsuga’, a través de diferentes negocios.
De esta manera, se encontró que el delincuente legalizó dinero ilícito en la compra y venta de jugadores en territorio argentino. El hombre era propietario de de una empresa llamada International Trade & Commerce S. A., esta compañía habría firmado un convenio con un equipo de la C del fútbol argentino, Según El Tiempo, el arreglo fue por “125.000 dólares, a cambio del 70 por ciento de los derechos económicos de los jugadores adquiridos por el equipo Rosario Central”.
Por otro lado, también fue vinculado como uno de los dueños de Hard Business, organización quien de acuerdo a medios internacionales tuvo un contrato en 2014 con Full Play International Television S. A. para presuntamente lavar dinero del narcotráfico a través de la venta de boletería para los partidos de la Selección Colombia ante Jordania y Senegal.

