Aunque el proceso oficial de negociación del salario mínimo para 2026 aún no inicia, en el Gobierno ya habría una decisión tomada: la propuesta será un aumento del 11%. Así lo indican fuentes del Ministerio del Trabajo, confirmando que esta postura responde a directrices del presidente Gustavo Petro, con el objetivo de fortalecer el poder adquisitivo de los trabajadores que devengan el ingreso básico mensual en el país.
La cifra ya se estaría reflejando en los presupuestos de gasto de personal de entidades públicas para el próximo año, lo que sugiere que la posición no solo es oficial, sino anticipadamente ejecutada en el Presupuesto General de la Nación.
¿Qué significa un aumento del 11%?
De aplicarse el incremento, el salario mínimo mensual para 2026 pasaría a $1.580.085. Esta propuesta representa una subida superior al doble de la inflación proyectada (alrededor del 5%), lo que para el Gobierno significa un avance en términos de justicia salarial.
Según declaraciones pasadas del presidente Petro, su objetivo es lograr “un buen decreto de elevación del salario mínimo”, manteniendo la tendencia de ajustes que superen el índice de precios al consumidor, como ha ocurrido desde el inicio de su mandato.
Riesgos económicos: ¿qué dicen los expertos?
Aunque la intención del Gobierno es proteger el ingreso de más de 3,5 millones de colombianos, varios analistas y gremios han expresado preocupación por las implicaciones económicas de un aumento de dos dígitos en un contexto de recuperación económica moderada.
Un informe reciente de Bancolombia advierte que, bajo este escenario, los costos empresariales aumentarían un 7,6% nominal anual, afectando especialmente a sectores con alta participación de la nómina, como el comercio, los servicios intensivos en mano de obra y la manufactura.
A ello se suman preocupaciones sobre la formalización laboral, ya que un alza significativa sin un crecimiento proporcional en la productividad podría generar presión sobre las microempresas y reducir su capacidad para contratar personal formal.
Los antecedentes y el panorama laboral
Desde 2022, los aumentos del salario mínimo han seguido una línea ascendente: 10,7% en 2022, 16% en 2023, 12% en 2024 y 9,53% en 2025. La tasa de desempleo, sin embargo, ha mostrado una mejoría, ubicándose en 8,8%, la más baja desde antes de la pandemia, lo que le ha permitido al Ejecutivo defender su modelo de incrementos como sostenibles.
El ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, reiteró que el aumento se discutirá en la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales, y que “si no hay acuerdo, el Presidente tiene la potestad legal de decretar el aumento”.
Lo que sigue: concertación, cifras y tensión
La mesa de concertación, en la que participan sindicatos, empresarios y el Gobierno, se instalará oficialmente en diciembre. El proceso estará respaldado por insumos técnicos del DANE, el Banco de la República y el Ministerio de Hacienda.
Mientras tanto, el mercado se mantiene en alerta, y algunos sectores económicos ya anticipan ajustes en sus planes de contratación e inversión, en función del posible impacto que traería un incremento del 11%.