El expresidente Álvaro Uribe Vélez regresará a la arena electoral en 2026, esta vez como candidato al Senado en la lista cerrada del Centro Democrático. La confirmación la dio Gabriel Vallejo, director nacional del partido, quien aseguró que el exmandatario ocupará el lugar número 25 en la lista que presentará la colectividad para las elecciones legislativas del próximo año.
“Nosotros aspiramos a tener 25 senadores, entre otras cosas porque si los temas judiciales se lo permiten, el presidente Álvaro Uribe será el número 25 en la lista. Ese es el único que tenemos fijo ya”, afirmó Vallejo.
El movimiento marca un giro significativo en la estrategia del uribismo, que busca recuperar fuerza en el Congreso luego de perder influencia en las elecciones pasadas. Según Vallejo, la propuesta de volver a la contienda fue iniciativa del propio Uribe, quien ha estado alejado de la vida parlamentaria desde su renuncia en 2020, en medio del proceso judicial que enfrenta por presunto fraude procesal y manipulación de testigos.
Estrategia para recuperar protagonismo
La decisión de usar una lista cerrada forma parte de una estrategia más amplia del Centro Democrático para consolidar nuevamente su bancada en el Capitolio. En palabras del director del partido, se espera que con esta fórmula puedan alcanzar al menos 25 curules en el Senado y obtener una representación significativa en la Cámara.
El listado será definido por un comité evaluador que, según se indicó, tendrá en cuenta criterios como:
- Formación académica
- Reputación y honorabilidad
- Representación regional
- Identificación con los principios del partido
“Este es su partido, el de la mano firme y el corazón grande”, agregó Vallejo, haciendo referencia al liderazgo histórico de Uribe en la colectividad.
Críticas desde el Pacto Histórico
La noticia no tardó en generar reacciones desde sectores de oposición. Gabriel Becerra, representante a la Cámara por el Pacto Histórico, expresó su inconformidad con el anuncio, señalando que se trata de una estrategia para blindarse judicialmente.
“No es política, es estrategia para asegurarse fuero e impunidad. Colombia merece futuro, no el mismo libreto de siempre”, dijo Becerra.
El regreso del exmandatario al Senado coincide con la reorganización interna del partido, que recientemente sumó a Miguel Uribe Londoño como precandidato presidencial, consolidando así un bloque electoral que aspira a disputar el poder tanto en el Congreso como en la Casa de Nariño.
El Centro Democrático se prepara para una campaña que buscará reconectar con su base política y defender la agenda del “uribismo” en un escenario nacional cada vez más polarizado. Con Uribe de nuevo en la papeleta, el debate político del 2026 promete estar marcado por su figura y legado.

