A medida que avanzan las indagaciones sobre la trágica muerte de Valeria Afanador, la menor que fue reportada como desaparecida durante 19 días en Cajicá, nuevos elementos salen a la luz y refuerzan la necesidad de esclarecer lo ocurrido. En las últimas horas, el abogado de la familia, Julián Quintana, ofreció detalles relevantes sobre el estado en el que fue hallado el cuerpo.
Le puede interesar: “Mis hijos tienen miedo de salir”: papá de Valeria Afanador tras retirar a los hermanos de la menor del colegio
“Tenía dos heridas”: primeras pistas antes del fallecimiento
Durante una entrevista con Noticias Caracol, Quintana reveló que el primer dictamen de Medicina Legal confirmó que la causa principal de muerte fue ahogamiento, pero también señaló que existían lesiones previas que podrían ser clave en el caso:
“Tenía dos heridas, escoriaciones, que son raspaduras, provocadas antes de que muriera”, aseguró el abogado.
Según el testimonio, las marcas no eran mortales, pero no estaban presentes antes de su desaparición. Estaban ubicadas en el torso y en la mano izquierda de la menor. Además, mencionó que debido al proceso de descomposición, los pliegues de la piel en las manos estaban desdibujados, lo cual puede dificultar algunos análisis forenses.
La escena del hallazgo: una zona ya había sido rastreada
Uno de los aspectos más controversiales del caso es el lugar donde fue encontrado el cuerpo de Valeria. El Comandante de Bomberos de Cajicá, Rafael Leguizamón, aseguró en entrevista con El Espectador que el área había sido revisada exhaustivamente:
“Como organismos de socorro, yo puedo garantizar que en el sitio donde apareció la menor se hicieron recorridos por tierra, en bote, inmersión de buzos, labores de gancho cuerda. En el lugar, se pasaron más de cinco o seis veces por ahí y no se habían obtenido resultados”.
Por eso, las autoridades consideran altamente improbable que el cuerpo hubiese estado allí desde el inicio de la búsqueda, lo que podría apuntar a un posible desplazamiento del cadáver o incluso, a una alteración de la escena.
Demoras en el reporte inicial
Otro punto que genera preocupación es el retraso en la notificación oficial de la desaparición. Según el comandante Leguizamón, el reporte a los organismos de emergencia se emitió cuatro horas después, lo que pudo afectar el desarrollo de las primeras acciones de búsqueda:
“La idea en una situación de esas es actuar en forma inmediata. En la investigación también se está analizando cómo fue el reporte de la emergencia”, explicó.
Una desaparición sin antecedentes en el municipio
El secretario de Seguridad de Cajicá, Wilson Halaby Nagui, también expresó la magnitud del caso para la comunidad local:
“Regularmente, no se han presentado desapariciones como este caso que nos comprometió por 19 días, que es el de Valeria... Es la primera vez que tenemos este tipo de casos”.
Con múltiples elementos aún sin esclarecer, tanto la familia como la opinión pública siguen exigiendo que se conozca la verdad completa sobre lo que ocurrió con Valeria. El caso ha puesto en evidencia fallas en los protocolos de seguridad escolar y búsqueda, así como posibles omisiones que aún deben ser respondidas por las autoridades correspondientes.