La reciente elección de Carlos Camargo como nuevo magistrado de la Corte Constitucional reavivó el ambiente polarizado de la política colombiana. El nombramiento, que no favoreció a María Patricia Balanta —candidata ternada por la Corte Suprema de Justicia y percibida como cercana al Gobierno— generó una ola de críticas tanto desde el oficialismo como desde la oposición.
El presidente Gustavo Petro reaccionó con dureza frente al resultado, sugiriendo que la decisión del Senado respondió a intereses excluyentes. A través de su cuenta en X (antes Twitter), el mandatario escribió:
“Excluyeron la mujer y la negra, bajo el infundio de que era mía y me tomaba la corte. Mentirosos sucios. Nunca he conocido a la señora Balanta hasta hace tres días... El que se elige con métodos corruptos es corrupto. Juez que usa medios corruptos es corrupto”.
Críticas desde la oposición: “Corrupción y clientelismo”
Desde el otro extremo político, la senadora Paloma Valencia, del partido Centro Democrático, fue enfática en sus señalamientos contra el Gobierno durante su intervención en el programa El Debate, de Semana.
“Es asqueroso, no encuentro otra palabra. Asqueroso lo que está haciendo Gustavo Petro, porque muestra su corrupción. Él ha manejado los cargos públicos de acuerdo con sus intereses políticos”, declaró la congresista.
Valencia cuestionó duramente los criterios para el manejo de cargos en el Ejecutivo, señalando la existencia de cuotas burocráticas y decisiones basadas en conveniencias partidistas:
“Aquí lo que hay son cuotas burocráticas, despresando como si fuera un pollo asado el Estado”.
Además, aseguró que no existe un proyecto nacional estructurado en la administración actual:
“Me parece que degrada lo que tiene que ser un gobierno, que muestra que aquí no hay un proyecto de país. Aquí hay una cantidad de intereses que se van pagando con favores de la administración pública. Asqueroso”.
La postura de María Patricia Balanta
Por su parte, la jurista María Patricia Balanta negó tener vínculos con el Gobierno nacional y denunció haber sido víctima de estigmatización por razones de género y raza:
“Me han estigmatizado. Yo estoy segura que es por ser mujer y por ser negra, porque a mí no me ubicaron en el petrismo y yo no soy petrista”.
A pesar del respaldo que algunos sectores adjudicaron al presidente Petro hacia su candidatura, Balanta insistió en su independencia política:
“Yo no pertenezco al Gobierno, yo no he hecho alianzas con ningún partido político. Y he cumplido este proceso ante el Congreso y los senadores pueden dar fe… los he conquistado en los pasillos, los he atrapado en cualquier espacio donde pueda hablar con ellos”.
Un nombramiento con implicaciones más allá del Senado
La elección de Carlos Camargo —exdefensor del Pueblo— ha sido interpretada por analistas como una derrota para el oficialismo y un punto de inflexión en la relación entre el Ejecutivo y la rama judicial. Más allá del resultado, la controversia dejó al descubierto una creciente desconfianza institucional y una fuerte carga de polarización en torno a decisiones clave para el futuro jurídico y democrático del país.