En un giro dramático en el caso de la desaparición de Valeria Afanador, su padre, Manuel Afanador, desmintió un dibujo que se había presentado como una pieza clave para la investigación. En medio de un doloroso relato, el padre de la menor, de 10 años, también criticó a la Fiscalía por no tener avances en el caso, lamentó que la familia sea señalada como culpable en redes sociales, e incluso cuestionó la falta de tecnología de las autoridades para encontrar a la niña.
El dibujo que no es de Valeria y la desconfianza en la investigación
La angustia del padre de Valeria, desaparecida en Cajicá el 12 de agosto, se hizo evidente al referirse al dibujo que había circulado en medios de comunicación, supuestamente hecho por su hija. Manuel Afanador fue tajante al afirmar que no lo reconocen como un trazo de la niña. “Uno sabe como papá qué es lo que dibujan sus hijos”, expresó, detallando que han comparado el dibujo con los de Valeria y que no coinciden. Esta declaración pone en duda la veracidad de la evidencia presentada, y se suma a las críticas que ha hecho sobre el manejo de la investigación.
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Según el padre de la menor, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía no había visitado el colegio para analizar el casillero de Valeria ni sus pertenencias. Esta falta de diligencia, sumada a la difusión de los videos y el dibujo en medios antes de que fueran entregados a su equipo legal, ha generado una profunda indignación en la familia. “Mi indignación más grande es ni siquiera nosotros hemos podido ver videos, pero ya los medios de comunicación lo tienen”, aseguró con dolor.
Acusaciones y señalamientos en redes sociales
Además de la falta de avances, Manuel Afanador lamentó que su familia se haya convertido en blanco de señalamientos en redes sociales. “Todo el mundo ha señalado que es que el papá es el que quería desaparecer a Valeria”, afirmó, revelando que sus otros hijos, los trillizos hermanos de la menor, están experimentando un “proceso psicológico muy fuerte” con “miedo, con susto, con pánico”. El padre denunció que la Fiscalía se ha centrado en ellos como “principales culpables”, lo que ha desviado la línea investigativa.
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Manuel Afanador hizo un llamado desesperado a organismos internacionales como la Unicef y la ONU, así como a las embajadas de Estados Unidos y Reino Unido, para que aporten la tecnología necesaria que, según él, las autoridades colombianas no tienen. “No es posible que 18 días después una niña de 10 años con una discapacidad, con unas capacidades especiales, con síndrome de Down, con un lenguaje reducido, esté desaparecida y las autoridades no tengan el menor rastro”, cuestionó, calificando el caso como algo que incluso una “banda criminal internacional supremamente organizada” no podría haber logrado sin dejar ningún rastro. El doloroso testimonio refleja la profunda crisis y la impotencia que vive una familia que solo busca saber si su hija está con vida.