El anuncio de Miguel Uribe Londoño como precandidato a la Presidencia por el Centro Democrático ha sacudido el panorama político de la centro-derecha colombiana, no solo por el contexto en el que se da —tras el asesinato de su hijo, el senador Miguel Uribe Turbay— sino también por el simbolismo que representa su postulación para el partido.
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Entre las primeras voces que se pronunciaron estuvo la de la senadora Paloma Valencia, quien expresó su respaldo:
“Bienvenido Miguel Uribe Londoño, tras la tragedia que nos conmueve, al Centro Democrático, donde compartimos ideales con su martirizado hijo.”
La declaración de Valencia se da en un momento de transición emocional y política para el uribismo, que aún enfrenta el impacto por la pérdida de uno de sus líderes más visibles y prometedores. El respaldo de la congresista subraya tanto la solidaridad personal como la apertura del partido a nuevas figuras que representan una continuidad ideológica.
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Uribe Londoño entra al debate político
La decisión de su precandidatura fue comunicada oficialmente el 22 de agosto, tras una serie de reuniones con la cúpula del Centro Democrático. Según el comunicado del partido, la familia de Miguel Uribe Turbay decidió “por unanimidad” que el padre asumiera su lugar en el proceso presidencial interno.
Con su entrada, Uribe Londoño se suma a una baraja de precandidatos compuesta por figuras como María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, Paola Holguín y Andrés Guerra, todos parte de la estructura del uribismo. A partir de ahora, el empresario y dirigente político tendrá que presentar su agenda programática, participar en debates y recorrer el país de cara a la definición del candidato oficial para 2026.
Un reto político y emocional
Aunque cuenta con el respaldo emocional de un sector del partido y del país que lamenta el magnicidio de su hijo, Uribe Londoño enfrentará el desafío de construir una propuesta propia, que no dependa únicamente del legado político de Miguel Uribe Turbay. Como lo expresó Paloma Valencia:
“Conoceremos las ideas, propuestas y trayectoria del padre para compararlas y confrontarlas de cara al país”.
El proceso interno del Centro Democrático se desarrolla en un escenario polarizado, con el país atravesando debates sobre seguridad, economía, narcotráfico y justicia, en los que se espera que el nuevo precandidato tome posición con claridad.

