Con una inversión superior a los $49.000 millones, la estrategia de Ingreso Mínimo Garantizado (IMG) continúa impactando positivamente a las poblaciones más vulnerables de Bogotá. Este mes, más de 953.000 personas pertenecientes a hogares en condición de pobreza extrema, con niños en primera infancia, estudiantes en colegios oficiales y víctimas con pertenencia étnica, recibirán transferencias monetarias que buscan garantizar condiciones mínimas de bienestar.
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Además, el beneficio se extiende a más de 89.000 personas que hacen parte de otros componentes sociales como jóvenes, personas mayores, población con discapacidad y miembros de la comunidad Emberá que han retornado a sus territorios. También se incluyen ciudadanos que residen en viviendas informales o bajo la modalidad de pagadiarios.
“La inversión de agosto supera los $49.000 millones, lo que eleva el total ejecutado en 2025 a más de $364.000 millones invertidos en el marco de la política social liderada por el alcalde Carlos Fernando Galán”, destacaron las autoridades distritales.
Esquema de distribución por grupos poblacionales
Las transferencias económicas se realizan a través de plataformas digitales como DaviPlata, Nequi, MOVii y Dale. En los casos donde se hace por giro, las personas deben estar atentas a la notificación por mensaje de texto para acercarse a los puntos autorizados.
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Componentes de hogares (más de $34.500 millones):
- Pobreza extrema: 193.000 personas
- Primera infancia: 178.500 personas
- Educación: 582.600 personas
- Víctimas con pertenencia étnica (Emberás Jaidrúa): 78 personas
Componentes de personas (más de $14.900 millones):
- Jóvenes: 1.152 personas
- Personas mayores: 72.400 personas
- Personas con discapacidad: 15.000 personas
- Emberás retornados: 205 personas
Enfoque diferencial para víctimas del conflicto armado
Uno de los componentes clave del IMG son las transferencias monetarias condicionadas, implementadas desde julio y dirigidas a hogares con niños, niñas y adolescentes. Para acceder a este beneficio, las familias deben cumplir con requisitos como la asistencia regular de los menores a jardines infantiles, colegios o centros especializados.
En este marco, se otorga una prioridad especial a las víctimas del conflicto armado, quienes enfrentan mayores dificultades de integración en la ciudad. Estas familias reciben $20.000 adicionales por menor, siempre que cumplan con los criterios establecidos.
“Cada niño, niña o adolescente víctima que cumpla la condicionalidad recibe $20.000 adicionales al monto base definido”, señala el programa.
Esta estrategia no solo representa un alivio económico inmediato, sino que también busca construir un camino más sólido hacia el desarrollo y la equidad para miles de hogares en Bogotá.