La ciudad de Cali está consternada y atemorizada luego del infame atentado que sufrió la ciudad en la tarde del jueves 21 de agosto. Un furgón lleno con pipetas de gas fue utilizado como ‘carro bomba’ para realizar un ataque terrorista en la ciudad; explotó en inmediaciones a la base aérea Marco Fidel Suárez y dejó un saldo de seis personas fallecidas y más de 70 heridos.
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Ante el atentado, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, viajó junto a la cúpula militar a la ciudad de Cali con el fin de atender la situación y determinar no solo los culpables y responsables del ataque, sino también para identificar a las víctimas del accidente. Por esto, sorprendió cuando el propio ministro confirmó que entre las seis personas que perdieron la vida había una mujer embarazada.
Sumado a esto, el ministro informó que entre las más de 70 personas heridas hay por lo menos ocho menores de edad y tres adultos mayores de 60 años, por quien se teme una compleja recuperación. Sánchez responsabilizó a las disidencias de las Farc como los responsables del cobarde ataque en contra de la población civil y aseguró el inicio de un operativo en contra de este grupo armado ilegal.
Multimillonarias recompensas por información de los perpetradores del atentado
En medio de la rueda de prensa el ministro Sánchez aseguró que el ataque fue en retaliación en contra de las Fuerzas Armadas que lograron en un operativo exitoso incautar 250.000 municiones pertenecientes a las disidencias de las Farc. Por esto, el ministro sentenció que "a los criminales no les ha quedado más opción que mostrar su desespero atacando a la población civil“.
Sobre las recompensas, Sánchez informó que por alias Kevin, uno de los cabecillas de esta organización criminal, hay una recompensa vigente de 1.641 millones de pesos, mientras que por alias Iván Mordisco hay una recompensa de 4.450 millones de pesos.