El caso por el magnicidio de Miguel Uribe Turbay sigue avanzando tras la muerte del político de 39 años. Las autoridades, en un esfuerzo continuo por esclarecer los hechos, han centrado sus investigaciones en la captura de los autores intelectuales del crimen.
Hasta el momento, el proceso ha permitido la detención de seis personas señaladas de participar en el plan y la ejecución del atentado, que tuvo lugar en el barrio Modelia de Bogotá. Entre los detenidos se encuentra el menor de 15 años que disparó y Élder José Arteaga Hernández, alias ‘el Costeño’, a quien se le atribuye la autoría intelectual de la operación criminal en su fase inicial.
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Sin embargo, los esfuerzos de los investigadores se han intensificado para ir detrás de los autores intelectuales del magnicidio, quienes, según los indicios, serían cabecillas de la Segunda Marquetalia de las disidencias de las Farc. A pesar de esta conexión inicial, las autoridades no descartan que existan muchísimos más involucrados en la cadena de mando y financiamiento del crimen.
Un reloj de lujo es la nueva pista
La revelación, publicada por el diario El Tiempo, indica que los investigadores tienen en la mira a dos personas más que habrían participado en el magnicidio, el cual la familia de Uribe Turbay exige que sea declarado como un crimen de lesa humanidad. De acuerdo con la información, la colaboración de un testigo protegido por la Fiscalía ha sido fundamental. Dicha persona ha entregado información vital que ha permitido estos avances significativos en las pesquisas. De hecho, los nombres de estos individuos ya se encuentran consignados en el expediente, aunque permanecen bajo estricta reserva.
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Uno de estos sujetos ya está siendo seguido de cerca por las autoridades. Según los investigadores, su rol sería el de un intermediario crucial, conectando a la banda de sicarios que fue contratada con los autores intelectuales. La identidad de este hombre, de alrededor de 35 años, se conoció al mismo tiempo que la de alias ‘el Costeño’. Según el testigo secreto, alias ‘el Costeño’ le rendía reportes detallados sobre cómo avanzaba el atentado.
Un detalle que ha llamado poderosamente la atención de las autoridades es que este presunto delincuente, tras el magnicidio, cerró sus redes sociales. No obstante, hace pocos días las volvió a activar, publicando una fotografía que ha captado las miradas de los investigadores. En la imagen, el hombre aparece con gafas oscuras, y en su muñeca porta un ostentoso reloj Rolex avaluado en 56 millones de pesos colombianos. Un investigador consultado expresó que “las publicaciones de este hombre parecen ser un claro desafío a las autoridades”.
Las autoridades ahora intentan establecer si esta valiosa pieza de lujo fue adquirida por el sujeto con el dinero que le habrían pagado por el crimen. Se ha conocido que, al parecer, los implicados habrían comenzado a reclamar su parte del botín una vez consumado el asesinato. Por ahora, las investigaciones avanzan de manera acelerada, mientras el país exige justicia y clama para que el magnicidio de Uribe Turbay no quede en la impunidad y todos los responsables, tanto materiales como intelectuales, rindan cuentas por sus actos ante la justicia.