El discurso que envió el expresidente Álvaro Uribe a las honras fúnebres del senador Miguel Uribe Turbay, quien fue víctima de un atentado, siguen generando polémica. Esta vez la precandidata presidencial y también senadora María José Pizarro le envió una carta abierta al exmandatario en la que criticó varias de sus afirmaciones.

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En la misiva, Pizarro recordó que la violencia le arrebató a su padre, Carlos Pizarro, quien también tenía intenciones de llegar a la Presidencia cuando fue víctima de otro magnicidio. En ese sentido, indicó que junto al presidente Gustavo Petro y a la Unión Patriótica han rechazado con vehemencia el atentado del que fue víctima Miguel Uribe. Por ello, pidió que se aclare pronto quiénes fueron los responsables del asesinato.

“Tenemos la obligación de garantizar la vida como bien sagrado de todos los ciudadanos. Por esta razón rechazo categóricamente el uso del crimen del Senador Uribe Turbay como excusa para la violencia verbal que estimula el uso de la violencia material. El dolor no puede ser una moneda electoral”, sostuvo la senadora.

Adicionalmente, sostuvo que la sorprendieron las palabras que envió el expresidente Uribe y las rechazó con vehemencia, pues consideró que tuvieron un tono inadecuado para la ceremonia y para el momento que vive el país.

“Ayer, durante las honras fúnebres en el Capitolio Nacional, quedé estupefacta al escuchar al expresidente Álvaro Uribe Vélez desafiar la paz en su discurso enviado desde su prisión domiciliaria. Entiendo su desgarro, pero rechazo de manera enérgica sus palabras. Los dirigentes del país, y quienes tuvieron el privilegio de presidir las instituciones, deben sembrar semillas para la reconciliación, no semillas para que crezca el odio y se justifique la violencia”, sostuvo la senadora del Pacto Histórico.

Pizarro rechazó señalamientos de Uribe contra la UP

La congresista también cuestionó duramente los señalamientos que hizo el exmandatario contra algunos miembros de la Unión Patriótica, pues en su discurso los señaló de promover delitos como el secuestro o los asesinatos.

“Sus palabras son una afrenta para los colombianos, para las 8.300 víctimas del magnicidio de la Unión Patriótica, para las familias de los cuatro candidatos presidenciales de izquierda asesinados en 1990, desconocidos en sus palabras, y para centenares de liderazgos civiles que son asesinados a lo largo del país. Sus palabras son también un insultol la dignidad presidencial, al orden constitucional y legal de nuestra nación. No, expresidente Uribe: no es estimulando el odio como se le rinde tributo al senador Miguel Uribe Turbay”, concluyó la senadora Pizarro.