El Gobierno de Estados Unidos, encabezado por el presidente Donald Trump, emitió la Orden Ejecutiva 14257, que establece aranceles recíprocos del 10 % para productos de países que no figuran en su Anexo I. Entre ellos está Colombia, lo que significa que una gran parte de sus exportaciones será gravada con un nuevo tributo del 10 % a partir del 7 de agosto de 2025.
“Los bienes de cualquier socio comercial extranjero que no esté listado en el Anexo I estarán sujetos a una tasa adicional ad valorem del 10 %”, establece el decreto firmado en la Casa Blanca.
La medida se enmarca dentro de la política de “reciprocidad arancelaria” impulsada por Trump, que busca equilibrar las condiciones de comercio internacional imponiendo tarifas a países que, según EE. UU., no ofrecen acceso equivalente a sus mercados.
¿Qué productos colombianos se verán afectados?
Aunque algunos productos seguirán amparados por el Tratado de Libre Comercio (TLC) vigente desde 2012, muchos otros bienes podrían quedar sujetos al nuevo arancel, entre ellos:
- Flores
- Confecciones y textiles
- Café procesado
- Químicos
- Bienes manufacturados
- Insumos agroindustriales
Según cifras del Ministerio de Comercio, Estados Unidos es el principal destino de las exportaciones colombianas, con ventas superiores a USD 2.400 millones solo en 2024.
Confusión y reacciones: ¿10 % o 20 %?
Aunque en redes sociales y declaraciones de políticos se habló inicialmente de un arancel del 20 %, la ministra de Comercio, Diana Morales, aclaró que el nuevo tributo es del 10 % y no se suma a un arancel general anterior, como se había interpretado erróneamente.
Sin embargo, la percepción de impacto sigue siendo alta. El exministro de Agricultura, Andrés Valencia, advirtió que esta decisión representa un “duro golpe para la economía nacional y el agro colombiano”, mientras que la senadora María Fernanda Cabal la calificó como una “consecuencia de la mala gestión del Gobierno”.
¿Y el TLC sigue vigente?
Aunque el nuevo arancel no deroga el TLC, sí representa una tensión comercial directa. Según analistas, podría ser interpretado como una herramienta de presión unilateral para forzar una renegociación o reevaluación del acuerdo comercial firmado hace más de una década.
“Se está evaluando el alcance legal de la medida y su compatibilidad con el TLC”, confirmaron fuentes del Ministerio de Comercio.
¿Qué viene ahora para Colombia?
El Gobierno colombiano aún no ha emitido un pronunciamiento oficial de alto nivel, pero se espera que en los próximos días inicie contactos diplomáticos y comerciales con Washington para buscar aclaraciones, excepciones o medidas compensatorias, especialmente en sectores estratégicos.
Un cambio en la política exterior de EE. UU.
El regreso de Trump a la presidencia ha traído un giro proteccionista en su política comercial, esta vez con implicaciones directas para América Latina. Mientras en su primer mandato los aranceles se enfocaron en China y Europa, ahora países como Colombia, Perú, Chile y México también enfrentan presiones por parte de Washington.
La aplicación de esta orden ejecutiva marca un nuevo capítulo en la relación bilateral, y para muchos sectores productivos en Colombia, el reloj corre contra el tiempo para mitigar el impacto del arancel que entra en vigor el 7 de agosto de 2025 a las 12:01 a. m. (hora del este).