El pasado 29 de julio de 2025, un terremoto de magnitud 8.8 sacudió la península rusa de Kamchatka, provocando olas de tsunami que han alcanzado las costas de Japón, Estados Unidos y otras naciones del Pacífico. La Agencia de Meteorología de Japón emitió una alerta roja de tsunami, ordenando la evacuación inmediata de más de 2 millones de personas, especialmente en las zonas de Fukushima y Hokkaido.
En medio del pánico, las redes sociales estallaron con referencias a un misterioso libro publicado hace más de dos décadas: Watashi ga Mita Mirai (traducido como El futuro que vi), de la dibujante japonesa Ryo Tatsuki.
¿Quién es Ryo Tatsuki y qué predijo?
Ryo Tatsuki es una mangaka que en 1999 publicó un cómic que documenta supuestos sueños premonitorios. En él, incluyó predicciones tan precisas como inquietantes:
- “El gran desastre ocurrirá en marzo de 2011”, frase impresa en la portada del libro que, tras el terremoto y tsunami de ese año en Japón, cobró gran notoriedad en medios locales.
- Predicciones sobre una pandemia global coincidente con la llegada del COVID-19.
- Una advertencia titulada “El verdadero desastre llegará en julio de 2025”, con una ilustración submarina que algunos interpretan como la ruptura de una falla tectónica.
Según el manga, en julio de 2025 “una grieta se abrirá entre Japón y Filipinas”, provocando olas tres veces más grandes que las de 2011 y “el mar al sur de Japón hervirá”.

¿Casualidad o clarividencia?
El reciente evento sísmico y la alerta de tsunami activada por el gobierno japonés parecen coincidir con las advertencias del cómic. En palabras de la autora, “un tercio del país será engullido” por el agua, lo cual ha generado escalofríos entre sus lectores. Si bien no hay pruebas científicas que respalden estas predicciones, el libro ha alcanzado un estatus casi mítico, vendiendo casi un millón de copias en Asia.
¿Qué dice la ciencia?
Aunque los expertos insisten en que no es posible predecir terremotos con precisión, el caso de Ryo Tatsuki sigue alimentando el debate entre ciencia, casualidad y misticismo. Para muchos japoneses, Watashi ga Mita Mirai ha dejado de ser solo un manga para convertirse en una especie de oráculo moderno.

