El matrimonio infantil sigue siendo una alarmante realidad para millones de niñas alrededor del mundo. De acuerdo con datos de Save the Children, cerca de 12 millones de menores son obligadas a casarse cada año, y una de cada seis lo hace incluso antes de cumplir los 15 años. Esta práctica no solo vulnera sus derechos fundamentales, sino que también representa una de las formas más extremas de violencia de género.
Distribución mundial del problema: Asia, África y América Latina en cifras
Los matrimonios forzados son especialmente frecuentes en ciertas regiones del planeta. Asia concentra el 45% de los casos, seguida por África Occidental y Central con un 33%, y América Latina con un preocupante 23%. Estas cifras reflejan desigualdades estructurales, pobreza extrema y arraigadas normas culturales que siguen limitando el futuro de millones de niñas.
Crisis y retrocesos: la lucha contra el matrimonio infantil está en riesgo
A pesar de los avances obtenidos en las últimas décadas, el camino hacia la erradicación del matrimonio infantil se encuentra en peligro. Según Save the Children, factores como el aumento de la pobreza, los conflictos armados y la crisis climática están agravando la situación y elevando los niveles de vulnerabilidad de las menores.
Durante situaciones de emergencia o crisis, la violencia de género tiende a aumentar. Las familias, enfrentando condiciones económicas precarias, pueden tomar decisiones desesperadas, como retirar a sus hijas de la escuela o casarlas forzadamente con la esperanza de que otra familia se haga cargo de su manutención.
El tiempo apremia: 300 años para eliminar el matrimonio infantil si no se toman medidas
El informe de Save the Children lanza una advertencia contundente: si no se toman acciones urgentes y sostenidas, podrían pasar tres siglos antes de que el matrimonio infantil desaparezca del mundo. La organización hace un llamado a los gobiernos, organismos internacionales y sociedad civil para priorizar políticas públicas, educación para las niñas, y programas de protección que les permitan crecer libres, seguras y empoderadas.

