Las autoridades acaban de confirmar la captura de Elder José Arteaga Hernández, conocido con el alias de El Costeño, señalado de ser uno de los cerebros detrás del atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, quien recibió dos disparos en la cabeza el pasado 7 de junio.
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De acuerdo con la información revelada por Noticias RCN, la detención se dio en la localidad de Engativá, en el occidente de Bogotá.
Hace apenas unas horas, se había emitido una circular roja de Interpol con el fin de dar con el paradero del sujeto. Esta medida tiene alcances internacionales, por lo cual la orden de captura podía hacerse efectiva en cerca de 190 países.
Por información que permitiera dar con la captura de ‘El Costeño’ las autoridades estaban ofreciendo una recompensa de 300 millones de pesos, pues es considerado uno de los eslabones más importantes de la investigación.
Al menos, parecía ser el coordinador del grupo que ayudó a cometer el crimen en el barrio Modelia el pasado 7 de junio. Tanto alias Gabriela (la mujer que llevó el arma Glock 9 con la que le dispararon a Miguel Uribe) como el conductor del carro en el que el sicario se cambió de ropa habían advertido que ‘El Costeño’ era el encargado de impartirles instrucciones para perpetrar el delito.
Así logró evitar a las autoridades ‘El Costeño’ durante casi un mes
Según reveló el diario El Tiempo, Elder José Arteaga es oriundo de San Pedro, Antioquia, tiene 40 años y tiene una carrera delictiva de dos décadas.
Aunque las autoridades habían dado con la captura de varios presuntos responsables del atentado contra Miguel Uribe Turbay, lo cierto es que ‘El Costeño’ consiguió evadirlas durante casi un mes.
De acuerdo con el citado diario, la circular roja de Interpol se emitió después de que las autoridades encontraron indicios de que ‘El Costeño’ tenía intenciones de viajar a Venezuela.
“Sin embargo, la Policía siempre lo tuvo ubicado hacia el sector de Ciudad Bolívar y Engativá, pero se movía constantemente y, con gran experticia criminal, evitó al mínimo el uso de dispositivos móviles”, le dijo una fuente cercana a la investigación a El Tiempo.

