La voz de Adriana Vargas, exesposa del cirujano plástico Luis Fernando Reyes, ha irrumpido con fuerza en el debate sobre la violencia de género en Colombia. En el pódcast Más allá del silencio, Vargas narró con crudeza el infierno que vivió durante su relación con Reyes, marcado —según su testimonio— por violencia física, psicológica, sexual, económica y médica.
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Una cirugía que marcó su cuerpo y su vida
Uno de los momentos más impactantes relatados por Vargas fue la cirugía mamaria que el propio Reyes le practicó, sin exámenes previos ni consentimiento informado. Según ella, la intervención fue una pesadilla: “Me dejó huecos, me destruyó los tejidos”. Días después, con fiebre y sin poder levantar los brazos, fue llevada de urgencia a una clínica donde descubrieron que tenía un nervio intercostal suturado.
Asegura que el cirujano nunca reconoció responsabilidad: “Me decía que era normal, que tomara acetaminofén”. Para evitar gastos, anotó el procedimiento como una “revisión de cicatriz”.
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Un proceso judicial lleno de trabas
El proceso judicial tardó más de nueve años, en los que hubo al menos cuatro fiscales y tres jueces. Adriana fue citada más de 50 veces. Finalmente, un juzgado de Bucaramanga condenó a Reyes por violencia intrafamiliar agravada.
Durante el juicio, su hija menor declaró. En ese momento, Reyes encendió su cámara en la audiencia virtual para saludarla, lo que fue interpretado como un acto de intimidación. “La niña rompió en llanto”, narró César Vargas, abogado de la víctima.
“No fue venganza, fue para que no callen”
Adriana también denunció violencia económica y manipulación legal. Recibió una demanda de divorcio en la que Reyes pedía la custodia total de su hija y que ella le pagara cuota alimentaria.
Tras sentirse sola y vulnerable, encontró apoyo en una red de mujeres en Bogotá. “Esto no lo hice por venganza. Lo hice para que quede precedente para otras mujeres”, dijo.
Según Vargas y su defensa, cuando pidieron medidas para impedir la salida del país del cirujano, él ya se encontraba en Dubái. Poco después, sus redes sociales fueron eliminadas.