El conflicto entre Israel e Irán entró en su séptimo día con una nueva escalada de violencia. Tras un ataque iraní con misiles que alcanzó el hospital Soroka de Beerseba, en el sur de Israel, causando daños importantes, las autoridades israelíes elevaron el tono de sus advertencias contra el líder supremo iraní, Ali Jamenei.
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“El cobarde dictador iraní disparó deliberadamente contra hospitales y edificios residenciales en Israel. Se trata de uno de los crímenes de guerra más graves, y Jamenei tendrá que pagar por sus crímenes”, afirmó el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, quien además declaró que Jamenei “ya no puede seguir existiendo”.
Hospital bombardeado en Israel desata represalias contra instalaciones nucleares en Irán
Según el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, el hospital alcanzado recibe a soldados israelíes heridos en la guerra en Gaza, lo que agrava la gravedad del ataque. Las sirenas de alerta se activaron en varias regiones de Israel, y miles de ciudadanos debieron refugiarse ante la amenaza de nuevas ofensivas.
En paralelo, el primer ministro Benjamin Netanyahu anunció una intensificación de los ataques contra infraestructura estratégica en Irán, incluyendo instalaciones nucleares. “Junto con el primer ministro, hemos ordenado intensificar los ataques contra objetivos estratégicos en Irán y contra la infraestructura energética de Teherán, para eliminar las amenazas al Estado de Israel y socavar el régimen de los ayatolás”, indicó Katz.
Durante la noche, el ejército israelí confirmó bombardeos contra un “reactor nuclear inactivo” en Arak y una instalación de desarrollo de armas nucleares en Natanz, en el centro del país. En la operación participaron al menos cuarenta aviones de combate. Israel aseguró haber destruido la principal instalación de enriquecimiento de uranio de Natanz.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó que se observaron “impactos directos en las salas subterráneas” del sitio atacado. Esto generó una fuerte respuesta de Irán, que acusó al OIEA de actuar como “socio de la guerra de agresión israelí”.
“Ustedes han traicionado el régimen de no proliferación”, escribió en X el portavoz de la cancillería iraní, Esmaeil Baqaei, dirigiéndose al director del OIEA, el argentino Rafael Grossi.
Hasta ahora, las cifras oficiales indican al menos 224 muertos en Irán desde el inicio del conflicto, mientras que los disparos iraníes han dejado 24 muertos en Israel. A pesar de la gravedad del panorama, Irán reiteró su compromiso con el derecho a la autodefensa.
“El agresor lamentará y pagará su grave error”, advirtió en X el canciller iraní Abás Araqchi, reiterando que su país continuará defendiendo su territorio ante lo que consideran una agresión no provocada.
Mientras tanto, el presidente estadounidense Donald Trump, aliado de Israel, no descartó una intervención militar directa para frenar el programa nuclear iraní, intensificando aún más la tensión internacional.